San Luis Potosí (OEM-Informex).— El ISSSTE está obligando a sus trabajadores a asistir de manera ordinaria sin pensar en el riesgo que se ponen al acudir a los centros de trabajo, actualmente existen personas de la tercera edad, quienes son parte del sector vulnerable a contraer el Covid-19, además los propios trabajadores del instituto reportan que hay pacientes sospechosos que ante la imposibilidad de atenderlos los mandan al Hospital General de Soledad de Graciano Sánchez y no son recibidos.
Los trabajadores del organismo sanitario, contaron que en las últimas horas recibieron a un paciente masculino de 70 años de edad con cuadro respiratorio que niega antecedente de contactos con COVID, fue llevado al infectólogo particular del su consultorio por insuficiencia respiratoria y ahí se realizó la prueba dando positivo, por lo que ingresó para manejo e intubación.
Por lo anterior, se llamó a la Secretaría de Salud para su traslado al Hospital General de Soledad, conforme lo acordado por el sector salud pero se hallaron con la negativa de este nosocomio pues presuntamente la afirmaron al ISSSTE que aún no están preparados.
Al igual, otros quejosos reportan condiciones irregulares de trabajo, ya que en los servicios de salud están contratando personal suplente quienes no tienen servicio médico, se arriesgan a contraer una enfermedad, aparte de que no les pagan las quincenas como ya es bien sabido, así como el material y medicamentos son precarios, el desabasto es muy fuerte.
Los que prefirieron guardar el anonimato reportan que existe irresponsabilidad por parte de los derechohabientes al acudir a realizar trámites porque al ver solas las oficinas asisten poniendo en riesgo al personal administrativo.
Inclusive los sindicatos no están realizando gestiones para la protección de los trabajadores, tanto los de confianza, como los de base.
“Múltiples servicios administrativos no son necesarios que estén abiertos al público, se está poniendo en riesgo un gran porcentaje de trabajadores, sin embargo, se está dando opción que quien se vaya será a cuenta de vacaciones, si es contingencia no deben obligarnos a los trabajadores a irnos y sean considerados los días de vacaciones”.
Se quejaron de la delegada estatal, Alicia Quezada Lara, por no hacer manifestaciones al respecto, ni salvaguardar la salud de todo el personal a su cargo “mejor están obligando a cerrar comercios que viven del día a día que las oficinas y áreas que no son necesarias ante tal contingencia, aún así el instituto no pierde, ni por eso van a dejar de quitar las deducciones a cada trabajador que forma parte de él. Porque no deja a los jefes de las áreas necesarias administrativas, quienes toman las decisiones son ellos, hay que considerar que como ven abierto al público los derechohabientes y con todo el personal por eso deciden ir, si estuviera cerrado ni ellos tendrían a que salir y ponerse en riesgo tanto ellos, como a sus familias y personal que les rodea o tienen contacto directo en ventanillas”.