El formato del primer debate presidencial fue anticuado, lo que propicia que las respuestas sean ambiguas y el ejercicio resulte aburrido, consideró Tomás Cruz Perales, vocero de la Arquidiócesis de San Luis Potosí.
Luego de que se realizó el primer debate entre las candidatas y el candidato a la Presidencia de la República, Cruz Perales se sumó a la crítica que se ha hecho desde diversos sectores de la sociedad, en cuanto a que el formato es "anticuado".
Señaló que la forma en que se llevó el debate, no ayuda a que los candidatos ahonden en la exposición de ideas, sino que propicia respuestas ambiguas, además de que se presta a la confrontación, que es lo que prevaleció en este primer encuentro.
Mencionó que parte de las críticas que ha escuchado, es que el ejercicio resultó aburrido, por lo que dijo considerar que se requiere un formato más dinámico, "solamente se dio la confrontación, necesitamos madurez, que se expongan las ideas que van a mover un proyecto de gobierno del candidato o candidata que llegue a ganar".
En ese sentido, dijo esperar que este primer debate motive a las candidatas y el candidato a "perfeccionar sus ideas", de modo que los próximos debates motiven a la ciudadanía a salir a votar el próximo mes de junio.
Cruz Perales evitó calificar quién fue el o la mejor, y quién fue peor en este primer debate, y señaló que si bien no es una obligación, la Iglesia busca promover la participación de la ciudadanía en el proceso electoral, "necesitamos promover, motivar a que haya más interés por parte del electorado".
El segundo debate presidencial organizado por el Instituto Nacional Electoral (INE) está programado para el 28 de abril, en el mismo horario de 8 de la noche.