Una de las entidades sanitarias que no se daba abasto durante este fin de semana navideño fue el de la Cruz Roja Mexicana que durante el 24 y 25 de diciembre salió a atender a 122 personas en todo el Estado, quienes resultaron víctimas de las fiestas decembrinas. De esos, tan sólo en la capital durante los dos días de fiesta se atendieron a 61 pacientes.

Durante el fin de semana navideño en total se ofrecieron 61 servicios médicos en la capital potosina por parte de voluntarios y socorristas de esta institución altruista, quienes prefirieron quedarse en las frías y desoladas bases periféricas a velar por la salud de los potosinos, que refugiarse en el calor de sus hogares para pasar las fechas con sus familias.

Oscar Segura Rodríguez, delegado Estatal de este organismo sanitario, realizó el recuento de los hechos atendidos por su personal médico en donde además apuntó que 72 fueron los voluntarios que participaron en la capital del Estado en ambos días para atender el llamado de auxilio de la ciudadanía.

En la Noche Buena se ofreció auxilio a 9 personas caídas, 4 choques, 4 enfermos, un golpeado, un herido por arma blanca, se realizó un rescate, un traslado, una volcadura y una persona que no fue hallada, es decir se trató de una llamada falsa.

Para la Navidad, es decir el día 25 de diciembre se reportó que se registraron 3 personas caídas, 6 choques, un cortado, 15 enfermos, 5 golpeados, 6 heridos por arma blanca, un servicio especial, y una volcadura.

Para el siguiente fin de semana en que se dará la conclusión de este 2018 e inicio del 2019 se recomienda a la población evitar el uso de pirotecnia así como no excederse en el consumo de bebidas alcohólicas, pues se ha observado que durante los choques una de las constantes es el abuso de bebidas embriagantes.

Al igual en caso de niños ancianos y pacientes con enfermedades crónicas, se sugiere evitar exposiciones a bajas temperaturas, ya que aún nos encontramos en plena temporada de contagio de influenza del tipo AH1N1.

Así también se invita a la población a no excederse en alimentos altos en grasas que también pueden ocasionar problemas a personas diabéticas e hipertensas.

Otra de las encomiendas propias de la época es no dejar veladoras encendidas, evitar accidentes en los hogares, no dejar a los niños sin supervisión de un adulto, para evitar algún riesgo a su salud.