Los aplausos fueron unánimes, parte de la nueva realidad política del país. Priístas, panistas, morenistas, perredistas, de todos colores y sabores políticos; el gobernador Juan Manuel Carreras se veía feliz, relajado, destacando logros y haciendo autocrítica, a cuatro años de haber asumido el gobierno del estado.
Las palmas estallaron al final de cada párrafo, de cada cifra, de cada rubro, durante la hora y 12 minutos que duró la lectura proyectada a través de un moderno teleproter, que mantuvo al titular del poder ejecutivo con la cabeza levantada, sin leer las tradicionales hojas de papel, en un escenario majestuoso pero austero.
El Centro Potosino de Convenciones reunió a la clase política local y nacional. Vinieron los gobernadores de Jalisco, Zacatecas y Aguascalientes –éste último, fue víctima de un ataque de tos de 40 segundos mientras era entrevistado en vivo–; también estuvieron presentes el presidente del PRI, la secretaria de Economía, los ex gobernadores Teófilo Torres, Fernando Silva, Marcelo de los Santos y Horacio Sánchez, senadores, diputados federales.
La primera fila era colorida, estaban militantes de todos los partidos, incluyendo al súper delegado federal Gabino Morales enfundado en traje caro, aunque con varias planchadas, que lo hacían brillar a pesar de la penumbra. El empresario Carlos López Medina “El Chato”, que veía el inmueble como queriendo comprarlo y los líderes de cámaras empresariales, ávidos de fotos y carentes de liderazgo.
Juan Manuel Carreras llegó puntual; temprano había acudido al Poder Legislativo a entregar su informe y saludar a los diputados, a quienes les ofreció cercanía y colaboración, así como un discurso breve que dejó a sus compañeros de partido con la ceja alzada por el destacado agradecimiento al apoyo del presidente López Obrador.
Se colocó en medio de las enormes pantallas y delante de la Bandera Nacional, para empezar la lectura de su informe.
Luego de anunciar que una inversión privada de 130 mil millones de pesos en cuatro años produjeron 70 mil empleos formales, Carreras López convocó a San Luis Potosí a cerrar fuerte el último trienio de su mandato y dejar como legado un estado más incluyente. Tan sólo en el sector comercio se invirtieron en un año 18 mil millones de pesos para crear 14 mil nuevos empleos.
Ante el auditorio, de unas dos mil personas, en una atmósfera que mejoró conforme avanzó el discurso el mandatario potosino habló de los proyectos que están en negociación en el Gobierno Federal para llevar turismo al altiplano y a la huasteca potosina, en donde las inversiones en infraestructura carretera y aeroportuaria suman fácilmente los dos mil millones de pesos.
El mandatario potosino fue interrumpido 53 veces por una cauda de aplausos de los asistentes, encabezados por la secretaria de Economía del Gobierno Federal Graciela Márquez, quien calificó el acto de “excelente” y los resultados del Cuarto Informe de “magníficos”, mientras que “Alito” fue más contundente al precisar que Juan Manuel Carreras López “es un gobernador muy fuerte. Es un gran gobernador y su informe fue extraordinario”.
Es indudable que el doctor Carreras López estuvo en su día, con cifras que hablan de un buen gestor de recursos, de alguien que conoce las entrañas de las dependencias federales, y esa es la principal ventaja que tiene San Luis Potosí para lo exitoso que se esperan los próximos dos años en cuanto a inversiones.
El magistrado Juan Ramiro Robledo también emitió un calificativo, aunque muy lacónico del Cuarto Informe al señalar que fue “extraordinariamente bueno”.
El presidente del Congreso del Estado, el diputado Martín Juárez Córdoba, fiel a su estilo explicó que “hay mucha objetividad, momentos muy puntuales en el informe del doctor Carreras López y hay que valorar todo”.
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