La adquisición de vehículos nuevos en San Luis Potosí creció 15.6% durante 2023, en comparación con cifras de 2022, y para este año se prevé que siga en crecimiento.
De acuerdo con información estadística elaborada por la consultora Urban Science para la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA), durante 2023 se reportaron 24 mil 436 compras de autos ligeros en San Luis Potosí, esto es 3 mil 289 unidades más respecto a las 21 mil 147 que se comercializaron en 2022.
Tan solo en diciembre, el mercado automotor del estado realizó 2 mil 592 operaciones comerciales de vehículos cero kilómetros, principalmente de usos múltiples, compactos, camiones y subcompactos, cantidad mayor en 33 unidades respecto a las 2 mil 559 que se movilizaron en el mismo mes del 2022.
Esa cantidad de vehículos comprados en San Luis Potosí representa una aportación estatal del 1.8% en el volumen total del millón 363 mil 524 movilizados en el año a través de las agencias distribuidoras de la AMDA en la República, con lo que la entidad se ubicó en el lugar 18 a nivel nacional en ventas de automotores nuevos.
Al respecto, Eugenio Robles Alvarado, ex presidente de la AMDA en San Luis Potosí, manifestó que para este año se estima crecimiento de 7.4 o 7.5% con respecto al año pasado, con lo que la industria estaría vendiendo un millón 476 mil o 500 mil vehículos, “esto habla de una recuperación en el país”.
Sin embargo destacó que hay un factor que se debe tomar en cuenta, ye s que los autos de procedencia china han comenzado a ganar territorio en el país, y ahora representan ya el 20% de las unidades que se venden en México.
Si bien esta competencia está permitida en el libre mercado, destacó que los productos de China, en este caso los automotores, no tienen las mismas condiciones que los provenientes de otras armadoras que deben cumplir con un porcentaje de integración en los países que conforman el Tratado México, Estados Unidos, Canadá (T-MEC) para acceder a dichos mercados.
Destacó que dichas armadoras tienen plantas en México y contribuyen al desarrollo industrial y laboral del país, y al no afrontar las mismas reglas que las armadoras chinas, se les pone en riesgo, “está bien que crezcan (las ventas de autos chinos) es un mercado de libre competencia, pero las reglas tienen que ser parejas porque hay marcas que han apostado con cantidades muy cuantiosas a México”.