Para tomar decisiones importantes en torno a la emergencia sanitaria por el Covid-19 en San Luis Potosí, el gobernador de San Luis Potosí, Juan Manuel Carreras López, ha decidido llevar a cabo reuniones presenciales con líderes empresariales y sindicales, catedráticos, presidentes municipales de la zona metropolitana, atendiendo en todo momento las recomendaciones de las autoridades, federales y estatales, en materia de salud.
El mandatario estatal asiste también a algunas de las reuniones diarias, en las que se informa a los medios de comunicación el avance del Coronavirus en la entidad.
Apenas el jueves pasado asistió a la toma de protesta del nuevo rector de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí, Alejandro Javier Zermeño Guerra.
En su más reciente reunión estuvo acompañado de la titular de la Secretaría de Salud, Mónica Liliana Rangel Martínez, así como la presidenta de la Junta Directiva del Sistema Estatal DIF, Lorena Valle Rodríguez.
Ahí, explicó los avances de las medidas de apoyo económico que implementa su administración, las cuales consideran incentivos fiscales, financiamiento a emprendedores de micros, pequeñas y medianas empresas; continuidad a obras de infraestructura y compras gubernamentales; así como apoyos sociales para sectores vulnerables.
Desde la declaratoria de la Fase 1 de la pandemia, su administración implementó estrategias de socialización de las medidas de sanidad entre la población, como el lavado frecuente de manos, la aplicación de la sana distancia y el toser o estornudar en el ángulo interno del brazo, además de la suspensión de actividades en parques, centros deportivos, sitios turísticos, entre otros.
Para afrontar la Fase 2, se implementó el Plan de Reconversión del Sistema Estatal de Salud, dividida en dos tipos de atención para las y los habitantes: cotidiana y por coronavirus; en la que participan los Servicios de Salud del Gobierno del Estado, las instituciones de seguridad social y la Secretaría de la Defensa Nacional.
La etapa 3 considera la implementación de filtros sanitarios con profesionales de la salud respaldados por corporaciones de seguridad, uso de cubrebocas y la sanitización de calles y espacios públicos.