La organización Nueva Luna A.C., en colaboración con la empresa Cummins, ha puesto en marcha un proyecto innovador para el fortalecimiento de liderazgos femeninos y la formación de redes Mujeres Constructoras de la Paz en colonias urbanas identificadas con altos índices de violencia hacia mujeres, niñas y niños.
Este esfuerzo busca no solo empoderar a las mujeres como agentes de cambio, sino también contribuir a la recuperación del tejido social en círculos poblacionales afectados por la inseguridad y el abandono.
El inicio del proyecto se dio este sábado con la realización del Primer Encuentro de Mujeres en Espiral, un espacio que reunió a 35 líderes sociales comprometidas con el desarrollo comunitario. Durante el evento, las participantes trabajaron en el fortalecimiento de sus habilidades de autocuidado y comunicación asertiva, herramientas esenciales para promover una mejor organización en sus comunidades.
Marcela García, presidenta de Nueva Luna A.C., explicó que este proyecto tiene como meta generar un impacto positivo en las dinámicas familiares y comunitarias a través de estrategias que fomenten la cultura del bienestar y la comunicación popular. "Este proyecto no solo busca el empoderamiento de las mujeres, sino que involucra a todas las familias en la construcción de entornos más seguros y solidarios".
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En su segunda etapa, el proyecto contempla la recuperación de espacios públicos abandonados que se han convertido en puntos críticos de inseguridad, y se destinarán esfuerzos a la rehabilitación y mejoramiento de escuelas que han sido desatendidas con el objetivo de devolverles su función como centros educativos y de convivencia.
Marcela García explicó que con ello, Nueva Luna A.C. busca transformar los entornos físicos y sociales de las colonias urbanas, brindando a las comunidades un nuevo sentido de pertenencia y seguridad, en este proceso, las redes de Mujeres Constructoras de Paz serán clave ya que su labor está orientada a promover iniciativas colectivas que fortalezcan los lazos familiares y comunitarios.
El proyecto, que tendrá una duración de un año, representa una apuesta ambiciosa por reconstruir el tejido social desde las bases comunitarias. La colaboración entre Nueva Luna y Cummins pone de manifiesto el potencial de las alianzas entre organizaciones civiles y empresas privadas para abordar problemáticas complejas como la violencia y el abandono social.