En 2022, la UNICEF expresó que en México, las mujeres representan el 51.4 por ciento de la población, de ellas, cerca del 62 por ciento se encuentran en edad menstruante, pese a ello no se cuenta con políticas públicas, programas o acciones específicas, que consideren de manera particular, la gestión del periodo menstrual.
La menstruación es la eliminación periódica a través de la vagina de una secreción sanguinolenta que contiene restos tisulares procedentes del desprendimiento del endometrio del útero no grávido. La duración media de la menstruación es de 4-5 días, y se repite aproximadamente 4 semanas durante la vida reproductiva de la mujer no gestante. El primer día de la menstruación se considera el inicio del ciclo menstrual. Los ciclos menstruales tienen una duración media de 28 días y este fenómeno del cuerpo se presenta al menos cinco días al mes como promedio.
La UNICEF presentó hace dos años, la “Primera Encuesta Nacional de Gestión Menstrual”, donde reportaba que el 69 por ciento de las adolescentes tenía poca o nada de información cuando les llegó su primer periodo, siete de cada diez señalaron que su mamá fue la primera persona con quien hablaron sobre este tema y la segunda fuente de información citada fue internet o redes sociales.
Sólo el 30 por ciento de este sector llevaba algún tipo de control o registro de la duración de su ciclo menstrual, el tipo de flujo o los síntomas que sentía. Más del 80 por ciento de las que estudiaban o trabajaban contaban con la infraestructura necesaria para la gestión menstrual en escuelas, oficinas u hogares.
▶️ Únete a nuestro canal de WhatsApp y recibe la información más relevante al momento
Al conmemorarse el día de la Salud e Higiene Menstrual en la Secretaria de Salud de Gobierno del Estado de San Luis Potosí, se argumenta que se busca presentar a la menstruación como un proceso biológico natural, para que las personas menstrúen sin ser repudiadas o excluidas, sin sentir miedo ni vergüenza y sin ser tratadas de manera inferior o estar expuestas a más vulnerabilidades.
La mayoría de las niñas tienen su primera regla o periodo entre los 11 y 14 años, pero algunas empiezan a los 8 y otras hasta los 17 años. La menstruación es un cambio perfectamente normal que indica que las niñas y mujeres adolescentes están creciendo de forma saludable, sin embargo, representa un gran cambio en su vida, a partir del cual deben tomar muy en serio ciertos aspectos para aumentar el cuidado, tales como tener prácticas de higiene más constantes, así como usar materiales adecuados y cómodos para recolectar o absorber la sangre como toalla ecológica, toalla sanitaria desechable, tampón, copa menstrual o calzón menstrual ecológico.
Se llama a comprender la menstruación como un proceso biológico completamente normal, conocer cómo se presenta y cómo se maneja, incluyendo síntomas como cólicos menstruales, cansancio y otros efectos normales físicos y emocionales, es muy importante para que niñas y mujeres puedan manejar su menstruación de manera adecuada, segura y con dignidad, permitiendo que se sientan lo más cómodas y saludables posible.
Debe haber un espacio digno en escuelas, acceso a servicios de agua, saneamiento e higiene, proporcionar información clara y oportuna a las niñas y adolescentes, antes de que llegue su primera menstruación, facilitar el acceso a insumos y material de higiene menstrual para que puedan manejar su menstruación dignamente y de manera amigable con el medio ambiente, superar los mitos y tabúes que confunden y desinforman y abordar y resolver el problema del acoso y las burlas en todos los ámbitos: familiar, comunitario y escolar.
Todas las mujeres que menstrúan tienen derecho a vivirla en las mejores condiciones, con acceso a espacios y productos adecuados. En todas las Unidades de Salud de la dependencia estatal se cuenta con personal capacitado en el tema de salud menstrual, ya que este personal es un actor clave para eliminar estigmas y mitos relacionados con la menstruación.