La representación del cuerpo femenino, como una manifestación de lucha contra las violencias que aquejan día con día a las mujeres, se ha convertido en una de las tantas formas de expresar su descontento ante un mundo que sujeta sus derechos como individuas autónomas.
Este pasado 24 abril, la artista dramática y plástica Eréndira Zapata, respaldada por la Colectiva Resistencia San Luis Potosí, elaboró una pieza escultórica donde resignifica el valor de la vulva y vagina, como un proceso dialéctico en contra de la misoginia.
Y es que, precisamente en esta fecha (desde hace cinco años) se realizan actividades, marchas y mítines a nivel nacional contra la violencia de género, las cuales también llevan por nombre “primavera feminista”. Por ello en todo su imaginario y conjunto creativo, Ere, -como la nombran- y Colectiva Resistencia San Luis, elaboraron con diversos materiales una vulva a gran escala para crear un diálogo entorno al derecho a decidir de las mujeres sobre su propio cuerpo.
Mujeres encapuchadas tomaron los alrededores de la Plaza de Armas con algunas pancartas y murales feministas, donde dispusieron esta pieza, que resultó para muchas de las y los espectadores algo controversial, no obstante, el mensaje fue claro, glorificar la independencia del cuerpo femenino.
“Con esta pieza buscamos que el mensaje acerca de decidir sobre nuestros propios cuerpos fuera conciso y directo, ello implicaba manifestar nuestro derecho a la interrupción legal del embarazo y la posesión de nuestros cuerpos y de nuestra sexualidad. La imagen de la vulva deja ver claramente nuestros posicionamientos al respecto ”.
“Hacer y crear este tipo de obras incita a las personas a sensibilizarse, y al tener ese encuentro con la pieza, se origina un acto político, en donde las dudas relucen y se empieza por la búsqueda de respuestas”, indicó Eréndira acerca de la escultura.
Esta obra está elaborada con esponja industrial, que fue tallada y esculpida por Ere. Pintada a mano y tiene una medida aproximada de 1 metro de alto, el cual le conllevó varios días de trabajo.
Por otro lado el simple hecho de hablar de la vulva incomoda a muchos, sin embargo, la artista y activistas indican que en el mundo del arte es una imagen simbólica que ha sido retomada por muchas creadoras que, como mujeres buscan que el mundo las comprenda y acepte como sujetas de una sociedad que les ha negado por mucho tiempo el poder decidir sobre sí mismas, sobre sus cuerpos y hasta por su propia seguridad.
En cuanto a la movilización feminista que se realizó al exhibir esta obra, la Colectiva Resistencia Feminista San Luis Potosí, comentó que “Este acto es un llamado a cerrar filas a indignarse y protestar por los crímenes que se cometen a diario contra las mujeres en México. Es un clamor a la sociedad, porque no pueden seguir siendo únicamente los grupos de feministas las que protesten por los feminicidios que se cometen en el país".
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