En el marco del "Día Mundial de la Concienciación del Autismo", que se conmemora cada 2 de abril, se llevó a cabo el Foro "Conociendo el Autismo", donde participaron desde familiares hasta terapeutas que abordaron desde sus vivencias la importancia de visibilizar a la población con esta condición.
Para Yolanda Juárez, mamá de un joven con autismo, lo más importante es permitir que su hijo o hija se desenvuelva con ayuda terapéutica una vez que se tiene el diagnóstico y brindarle toda la paciencia y el amor que requiere.
Nohemí Padilla, profesora de preescolar, precisó que debe existir la disposición y actitud para que las madres y padres de familia lleven a sus hijas e hijos a la escuela donde las actividades maximicen sus habilidades, lenguaje y convivencia.
Por su parte, Marco Antonio Medina, director del Centro Potosino de Autismo AC, hizo un llamado a las autoridades a visibilizar esta condición para su atención en favor de quienes viven y conviven con personas con espectro autista.
Asimismo, Gabriela Gómez, titular del área de autismo del Centro Municipal de Autismo en Maravillas, explicó que el diagnóstico se basa en la descripción del desarrollo del niño o niña y las observaciones en su comportamiento, por lo que la intervención es también individual.
La última conferencista fue la adolescente Luisa Camila Aguilar, quien recomendó no buscar curas "porque sus hijos no están enfermos, lo que quieren es ser tomados en cuenta".
Finalmente, Jessica Albarrán Ramírez, directora del Sistema Municipal DIF, dijo que el objetivo de conocer y visibilizar lo que se realiza con las niñas, niños y adolescentes que acuden al Centro en Maravillas, se cumplió, por lo que el compromiso de las autoridades es también ser más participativos en el tema y dotarles de mejores oportunidades de desarrollo para mejorar la calidad de vida.
La Asamblea General de las Naciones designó el 2 de abril como el Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo, que se puede definir como una afección neurológica permanente que se manifiesta en la primera infancia, independientemente del género, la raza o la condición social y económica.
Los principales síntomas son, las deficiencias persistentes en la comunicación y en la interacción social, así como y patrones restrictivos y repetitivos de comportamiento, intereses o actividades