La pandemia aceleró la digitalización de la industria en diferentes sectores, desde la telemedicina al comercio electrónico, y para apoyar el desarrollo tecnológico, Invariantes Fund cuenta con un capital de 30 millones de dólares para el financiamiento a startups del sector tecnológico.
Alejandro Zelaya, general partner de Invariantes Fund, destacó que desde 2016, Invariantes ha invertido en empresas “nacientes” de desarrollo de tecnología, ya sea en Estados Unidos, México, Guatemala, Ecuador y otros países de América Latina, y en diferentes áreas, como comercio electrónico, servicios financieros, u otros, “toda aquella empresa que de alguna otra forma tenga software y la tecnología como parte de su giro de negocio, no nos importa el sector, puede ser el sector de agricultura, puede ser el sector financiero, siempre y cuando estos emprendimientos tengan el componente tecnológico”.
Algunas de las empresas mexicanas en las que ha invertido son Kubo Financiero, que ofrece servicios financieros y capital de trabajo a pequeñas y medianas empresas; Merama, que ayuda a los emprendedores a comercializar sus productos por medios digitales; Confiabogado, que permite que las personas de cualquier nivel socioeconómico accedan a asesoría legal sin necesidad de recurrir a despachos de abogados; y Minu, que ofrece servicio de recursos humanos a más de 300 empresas. En estas cuatro empresas, Invariantes ha levantado 500 millones de dólares.
Respecto al funcionamiento de este venture capital, Alejandro Zelaya explicó que además de invertir en emprendimientos, incentiva a que otros inviertan en ellas, e invierte en otros fondos de capital, lo que les ha ayudado a generar una amplia red de contactos que también participan en la evaluación a los solicitantes de capital. Actualmente, Invariantes ejerce su tercer fondo de capital por 30 millones de dólares.
Mencionó que cada semana se evalúan al menos 20 emprendimientos, en los que se analizan parámetros como el tamaño del mercado, del problema que buscan atender, porqué lo hacen ahora, cuál es el equipo, si son empresas que empiezan o llevan mucho tiempo operando, si desarrollan la tecnología ellos mismos o es outosrcing, el alcance que tendrá la tecnología que desarrollan, entre otros, “es un proceso largo, en promedio nos toma unas 2 semanas analizando los emprendimientos, y usualmente nos apoyamos de la red de contactos para que nos apoyen en el análisis”, sobre todo cuando se trata de áreas en las que ellos no tienen experiencia.
Una vez que se autoriza la inversión de capital en una empresa, se les entrega el ticket de inversión y se le da acompañamiento hasta tener el retorno de la inversión, por lo que este proceso puede tomar de seis a ocho años durante los cuales hay sesiones de mentoría para ayudarles a que capten más capital o hagan alianzas con corporaciones más grandes que puedan hacer uso de la tecnología que desarrollan.
Mencionó que todos los fondos tienen montos distintos, “hemos hecho tickets desde 50 mil dólares y otros más altos hasta de 500 mil, depende de los méritos que la empresa y el emprendedor tengan, a veces necesitamos ver el crecimiento de ésta”, si en poco tiempo penetra otros mercados, creció en ventas o clientes, se cuenta con capital reservado para aplicar una inversión de seguimiento. La deuda se convierte en acciones de la empresa.
Si bien Invariantes invierte en startups de diferentes países de Amércia Latina, indicó que “el número de emprendimientos que salen de México todos los años va creciendo”, y la pandemia llevó a que esos emprendimientos que surgieron copiando modelos de otros países, se centraran en atender las necesidades de los mexicanos, “entonces seguro hubo un auge, sobre todo en industrias como la tecnología financiera, el comercio en línea y la telemedicina”.
En ese sentido, destacó que es cuestión de tiempo para que la digitalización entre a todas las industrias, “es algo que viene, que está aquí para quedarse”, por lo que recomendó que si hay emprendedores con intenciones de incursionar en el desarrollo de tecnología, lo hagan, “que vean otros modelos en otros países de cómo esto está funcionando, que vean otros modelos en otras industrias, que copien las mejores prácticas y que se lancen al agua”.