El área de comida del Mercado Hidalgo y sus caldos se mantienen como un atractivo para turistas y paseantes locales, coincidieron locatarios de este centro de abasto.
Verónica Morales, de comedores “Lucy”, destacó que durante el mes de julio se ha tenido una buena afluencia de comensales en los puestos de comida del Mercado Hidalgo, “hay mucho turista, hemos aprovechado estos días muy bien”.
Indicó que lo más buscado son las enchiladas, las gorditas, la comida casera como es el caldo de res, el pozole y espinazo; y es que cada quien se adapta a su presupuesto, y así sean una gorditas, nadie se va con el estómago vacío. Además, en este negocio se les incluye consomé y agua de sabor, con sus gorditas “bien servidas”, por lo que con tres pueden saciar el hambre, y cada una cuesta 14 pesos.
La otra opción es la comida corrida, por 90 pesos si es con guiso, o 100 pesos si lleva milanesa o bistec; este negocio tiene la particularidad de ofrecer tortillas recién hechas con un diámetro de casi 20 centímetros, “con una o dos tienen”.
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A unos metros se encuentra el puesto donde despacha Arnoldo Vargas, quien destacó que los mercados se mantienen en el gusto de los turistas, pues saben que en ellos encuentran los alimentos típicos de la ciudad, a tal grado que incluso han llegado turistas de Europa preguntando por el caldo de res, “no sé si va de boca en boca, pero llegan buscando los caldos”.
Señaló que hace años, los mercados eran más socorridos por visitantes rurales, sin embargo con el paso del tiempo se ha diversificado la clientela, lo que pasa ahora es que “los jóvenes de zonas rurales prefieren irse a las cadenas de comida rápida, tienen derecho a probar, pero estoy seguro que al final regresan”, esto porque destacó, en esos negocios no dan las mismas guarniciones, ni bolillo, ni tortilla, que son acompañantes indispensables para la comida del mexicano.
Ambos locatarios coincidieron en que las lluvias de estos días no ahuyentaron a la clientela, sino que al contrario, hubo más gente que acudió por su caldo, “arrasan con el caldo de res”; sin embargo se prevé que con el regreso a clases entonces sí disminuyan las ventas debido a los gastos que tendrán las familias.
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