El Director General del Centro de Bachillerato Tecnológico Agropecuario, CBTA, plantel 142, Pedro Arturo Hernández López, quiere que los padres de familia de dicha institución educativa, asuman los gastos de dos laudos laborales y les aumentó la cuota escolar para poder resolver sus errores administrativos.
Este plante se encuentra ubicado en el municipio de Venado, en el corazón del Altiplano Potosino, desde donde los padres de familia acudieron a este medio de comunicación para suplicar por ayuda, ya que en una reunión escolar reciente, este personaje les exigió que aporten la cantidad de 120 pesos para pagar dos laudos laborales de trabajadores despedidos por su administración.
Ante esta situación, no les quedó más que inconformarse y se resistieron a aportar dicha cantidad, ya que aseveran es injusto tener que sufragar un gasto que no les corresponde.
Este plantel se enfrenta a una crisis jamás vista por los pobladores, incluso señalaron que en sus casi 40 años de existencia, no habían visto este tipo de problemas, desde hace algunos meses esta escuela enfrenta dos demandas laborales de personas que trabajaron por honorarios y que al ser despedidos de manera arbitraria, ganaron ante los tribunales; por ello ahora los padres de familia quienes asumir la carga económica de esta decisión.
Los padres de familia narraron que la gran mayoría se negó a pagar el laudo laboral ya que generalmente hacen aportaciones económicas y para este asunto se les aumentó la carga económica. Además también refieren que anteriormente se les afirmó que realizarían algunas obras en la institución educativa y por ello apelaban a la buena voluntad de sus bolsillos, y aunque contribuyeron económicamente no han visto ninguna construcción.
Al mismo tiempo refieren que el problema se agudiza porque en el último informe que se dio a conocer, en la institución no aparecen los ingresos que se derivan del área productiva, como son el sector de industrias, el sector agropecuario, el sector agrícola, los del invernadero, y mucho menos lo que genera la renta de la cafetería.
Quienes prefirieron guardar el anonimato, argumentaron que hasta el momento no se sabe porqué las autoridades educativas del nivel medio superior no han interferido, no han iniciado una investigación a fondo, a pesar de que en contadas ocasiones han notificado sobre lo que está ocurriendo.