Los artistas surrealistas Leonora Carrington y Edward James ahora forman parte del imaginario de José Guadalupe Posadas, gracias al talento de tres creadores cartoneros que, desde el engrudo y papel maché, decidieron hacer un homenaje a estos personajes icónicos del arte.
Un encargo de la Dirección de Cultura del municipio de Xilitla, S.L.P., sería la puerta para que tres artistas cartoneros dispusieran toda su creatividad en elaborar piezas monumentales de cartón.
Felipe Arredondo, Carlos Reyes y Alejandra Barret "Gato Verti", forman parte de la casa taller "La Cartunera" en el mero corazón del Barrio se San Miguelito, lugar en el que desde hace más de cuatro semanas han dispuesto un total de 12 horas diarias en elaborar catrines y catrinas de más de dos metros de alto.
Su trabajo maravilló tanto a los residentes de este Barrio que en sólo unas horas estás esculturas se volvieron virales, atrayendo a gran cantidad de personas, quienes curiosas quedaban impresionadas de la técnica tan limpia y detallada de su modelado en el papel cartón.
"Ha sido un trabajo dedicado y laborioso. Son horas de empeño y detalle. Cada personaje es un reto. Estas esculturas en papel son parte de un proyecto para el municipio de Xilitla".
"Sin embargo, aquí en la Capital ha causado mucho interés. Estamos emocionados de la respuesta de la gente", mencionó el artista visual, Felipe Arredondo.
NADA FÁCIL HACER CATRINAS Y CATRINES
El proceso de estas figuras repletas de misticismo, es arduo y delicado. Para Alejandra, crear personajes desde cero en memoria a los artistas más prolíficos del surrealismo, es una experiencia satisfactoria.
"Me gusta mucho elaborar cada detalle de las piezas, desde los pliegues de la vestimenta, hasta los detalles del cabello y rostro. Hacer catrinas y catrines no es fácil, requiere de un amplio conocimiento de las formas, pero sobre todo de la técnica de la cartonería".
Carlos, quien apenas inicia en esta área de la plástica, refirió que lo más demandante ha sido poder modelar estás figuras de papel.
"Creo que lo más complicado es poder adaptarse al tamaño de estas esculturas, moverse y desplazar la pieza. Lo demás se va dando con el tiempo, desde el empapelado y modelado de las formas'.
DE CUATRO A CINCO AÑOS, LA DURACIÓN DE LAS ESCULTURAS
De 15 a 20 kilos, es el peso estimado de cada pieza, pues en su interior existe toda una estructura de metal la cual permite que se mantenga erguida.
"Son pesadas pues requieren de todo un esqueleto de metal soldado, aunado a ello las más de 10 capas de papel, impermeabilizante y la pintura".
La duración de estas esculturas, según lo refiere Felipe, es de cuatro a cinco años, aún manteniéndolas expuestas a la intemperie.
"Sus cuidados solo requiere que no estén expuestas tanto a la humedad, sin embargo, la manera en la que las elaboramos permite que en cada capa no sé filtre el agua"
"No obstante, es papel y cartón, que tienen un período de vida útil, así que hay que cuidarlas demasiado'.
Por último señalaron que estas piezas escultóricas serán trasladadas de manera especial a Xilitla, "se utilizará un camión y embalaje especial para trasladar cada escultura, debido a que son piezas de gran formato y además requieren de mucho cuidado".
Por lo pronto, el barrio de San Sebastián será la sala de exposición temporal de estos personajes, que esperan ser llevados al corazón del surrealismo mágico.