El alcalde capitalino Enrique Francisco Galindo Ceballos se comprometió éste domingo a que, después de las campañas electorales, algunas ya en curso, la ciudad no permanecerá contaminada con bardas pintadas, lonas o carteles.
“Pase lo que pase terminando las campañas vamos a borrar toda la propaganda, no podemos contaminar más la ciudad”, dijo ante vecinos de la colonia Eucaliptos, donde se realizó una jornada más del programa “Domingo de Pilas”.
También hizo referencia a la contaminación visual que provocan las bardas con anuncios de bailes y otros espectáculos, aunque no detalló si en estos casos se emite alguna autorización por parte de la dirección de Comercio Municipal. “Lo digo con respeto para todos, para los partidos políticos y hasta para los bailes públicos, se ve feo”, aseveró.
Es en el Centro Histórico donde más se atiende el tema de la contaminación visual provocada por carteles o pintas de anuncios de diferentes eventos; de entrada, la rotulación de bardas está prohibida dentro de su perímetro y, diariamente, inspectores retiran publicidad en carteles y pendones en vía pública, así como aquella que es colocada en postes, cabinas telefónicas u otros espacios no autorizados.
Fuera de su perímetro, e inclusive en diferentes colonias, la dirección de Comercio suele retirar publicidad en pendones, en anuncios tipo tijera o de bandera, principalmente por obstruir la vialidad.
Galindo Ceballos citó en su intervención que la administración realizará “un gran esfuerzo financiero” después de junio, para regresar al orden la imagen a la ciudad, para lo cual desde una vez giró instrucciones a los titulares de dependencias relacionadas con el tema.
De acuerdo con el reglamento municipal de anuncios está prohibido fijar o pintar anuncios, movibles o fijos, así como avisos, programas, de cualquier clase de material en edificios y monumentos públicos, en centros educativos y templos, en accesos o instalaciones de la vía pública, como lo son pavimentos, banquetas, postes de servicios públicos, candelabros de alumbrado público, kioskos, fuentes, andadores, camellones, glorietas, y en general en todos los elementos de utilidad y ornato de las plazas, paseos, parques, jardines, calzadas, calles y avenidas en general.
Sin embargo, es la postería del alumbrado público o de compañías telefónicas y de la Comisión Federal de Electricidad donde se suele fijar papelería publicitaria.