Con las anomalías detectadas en la compra de terrenos para el aeropuerto de Tamuín por el pasado gobierno, en 56 millones de pesos cuando no valían ni 15, para luego ser cedidos a Aeropuertos y Servicios Auxiliares, se confirma que "por donde revises sale pus".
Así lo expresó el titular de la Secretaría General de Gobierno, José Guadalupe Torres Sánchez, quien aseguró que serán presentadas las denuncias correspondientes, para que se realicen las investigaciones y pueda encontrarse a los presuntos responsables, quienes tendrán que responder ante la Ley.
El funcionario estatal añadió que “la herencia maldita estuvo enquistada más de 30 años en los gobiernos de San Luis Potosí, por ello nos ha sido imposible acabar con ella en sólo 18 meses”.
Confirmó que la Fiscalía General del Estado trabaja ya en la investigación de la compra a sobreprecio de ese terreno fangoso a un empresario Huasteco, por parte de la administración de Juan Manuel Carreras.
Aclaró que el actual gobierno no se basa en buscar responsables, ni en revanchismos políticos, “pero tampoco podemos ser omisos y no informar a las instancias procuradoras de justicia acerca de las anomalías e irregularidades cometidas con los recursos públicos, que no dejan de salir”.
Asimismo, detalló que en el caso del citado terreno hay dolo, por lo que también se pidió una investigación al Gobierno de la República y afirmó que hasta ahora no se conoce cuál fue la fuente de los recursos utilizados para la compra de los terrenos en 56 millones de pesos.
El encargado de la política interna en el estado indicó que, para continuar con el proyecto de ampliación, Aeropuertos y Servicios Auxiliares exige que sea en otros terrenos, ya que los entregados son inservibles, “alguien hizo esa compra irregular de suelo fangoso, indebida, inexacta y a sobreprecio.
Finalmente, Torres Sánchez observó que el vendedor está vigente y continúa con la venta de predios a precios desmedidos.