La dirección de Servicios Municipales del Ayuntamiento capitalino ha intervenido en diversas ocasiones la plaza de El Mariachi y el jardín Escontría; en lo que respecta al escenario que se edificó en anterior administración y quedó a medias, se está a la espera de que el Instituto Nacional de Antropología e Historia haga llegar un proyecto de cómo debe construirse para que armonice con el entorno.
Personal de la dependencia municipal alegó que la plaza y el jardín que se ubican en la calle Los Bravo, entre Eje Vial y la avenida 20 de Noviembre, en el Centro Histórico, sí recibe atención.
Además de que se ha mejorado la iluminación con la reposición de lámparas y la instalación del llamado alumbrado táctico –a petición de vecinos y comerciantes que denunciaban inseguridad, como robos y asaltos e inclusive la venta de droga-, también se atiende lo relacionado con la limpieza y el mantenimiento de las áreas verdes.
Se ha realizado el faldeo y poda de árboles de manera constante, así como el deshierbe y la limpieza de las áreas verdes en las que recién se realizó una reforestación.
Con respecto a la ausencia de pasto en grandes extensiones del área verde del jardín Escontría, se indicó que por tratarse de un área accesible para el paso de personas, suele secarse; sin embargo, no se ha considerado convertirlo en un xerojardín, al menos no de momento.
También se ha realizado la limpieza de la cantera, en especial del monumento a Venustiano Carranza; con respecto al vandalismo que sufrió el busto del ex gobernador Blas Escontría, solamente se informó que “al parecer” la Sindicatura Municipal ya había formulado una denuncia.
Asimismo, se destacó que la zona conocida como plaza de El Mariachi ha sido también sometida a mantenimiento, con la reposición de su alumbrado –que con frecuencia es dañado por maleantes o indigentes que pernoctan en la zona- pintura de la fachada e interior de sus arcos, y la reparación de bancas y reforzamiento de su anclaje.
Con relación al escenario que la anterior administración dejó a medias y que hoy sirve de refugio a personas en situación de calle, se destacó que la obra fue frenada en su momento por el INAH debido a errores en el diseño que no armonizaban con el entorno, pero hasta la fecha no se ha presentado el proyecto de cómo debe edificarse.