El aumento en las penas por violencia física contra la mujer, contribuyen a inhibir este delito, consideró la magistrada Olga Regina García López, presidenta del Supremo Tribunal de Justicia y del Consejo de la Judicatura.
Hace unos días, el Congreso del Estado aprobó reformas al Código Penal con las cuales se incrementan las sanciones por violencia física contra la mujer, que ahora se castigará con 8 a 20 años de prisión, y 400 a 700 UMA's.
Al respecto, García López señaló que estas iniciativas "que buscan sancionar la violencia contra las mujeres siempre son positivas porque ayudan a desincentivar la comisión de delitos".
También reconoció que para que ello ocurra, se requiere un trabajo integral, en el que se aumenten las penas y que efectivamente se sancione a quienes incurren en delitos como violencia física contra la mujer.
Mencionó que por ejemplo, en el caso de los feminicidios, se aplica de la media hacia arriba en las penas, que van de 40 a 60 años de prisión, es por ello que "en los juicios lo que se busca cuando se individualiza la pena, es que se aporten también pruebas y argumentos suficientes para poder sancionar con el mayor número de años".