La Casa del Migrante no resintió la baja en la afluencia de centroamericanos pese al blindaje de la frontera sur de México, señaló el padre Rolando Maldonado Salas, director del albergue.
A pesar de que los consulados centroamericanos reportaron una disminución de hasta 60% en la afluencia de migrantes derivado de las políticas migratorias adoptadas por México durante 2019, el sacerdote potosino indicó que la Casa del Migrante cerró el año con 14 mil 700 personas atendidas, contra 10 mil 700 que fueron recibidas en 2018.
Mencionó que la Casa del Migrante recibe sobre todo a centroamericanos provenientes de Honduras, Guatemala y El Salvador, por ejemplo el año pasado entre 70 y 75% de los migrantes que llegaron al albergue fueron hondureños, aunque en 2019 y este año se ha tenido ya la presencia también de cubanos, “el año pasado registramos 37 cubanos, que no lo tuvimos en 2018, y lo que va de 2020 van seis o siete personas de Cuba también”.
Además indicó que durante el año pasado se observó un incremento considerable en la cantidad de niños migrantes, alrededor de un 95% de los cuales viajaban acompañados y el resto solos. Maldonado Salas destacó que estas personas son expulsadas de sus países de origen por la violencia, sobre todo en el caso de Honduras, además de la situación política que prevalece en dicho país, a lo que se suman otros problemas en el trayecto hacia Estados Unidos, como las políticas migratorias de México, el acecho del crimen organizado y el maltrato de las autoridades.
Finalmente, mencionó que durante enero se recibieron 850 migrantes, lo que representa un flujo similar al registrado en el mismo mes de 2019.