La entidad del gran tunal, está repleta de grandiosidades como su cultura, gastronomía y por supuesto sus artesanías. En el estado potosino se elaboran gran cantidad de piezas artesanales, que van desde la mera ornamentación, hasta la posible colección por el trabajo tan meticuloso y artístico que le requiere al artesano.

Hablar de artesanía, es pensar en el oficio del trabajo de muchos mexicanos, que a través de sus manos hacen repensar conceptos y formas con gran sentido estético.

La artesanía potosina, contiene varias configuraciones en sus formas, que nos dan una mirada no sólo del arte popular de la entidad, sino que también son una entrada a la historia de las etnias y culturas nacientes de este estado.

Cabe señalar que artesanía y arte popular no son lo mismo, puesto que la artesanía en su mayoría tiene un carácter funcional, como lo son las vasijas, cofres, joyeros y hasta rebozos. El arte popular sin embargo, se refiere a la danza, a la música y al arte heredado de la época prehispánica.

En San Luis Potosí, son seis las artesanías distintivas, que hoy en día siguen vigentes y muy buscadas por el turismo nacional y extranjero. Estas piezas varían en tamaños y materiales. No necesariamente quien las compra son para darles un uso, sino que en muchos de los casos son utilizadas como elementos decorativos en los hogares.

Llevarse una pieza como estas, es apropiarse de apoco de la identidad potosina, detrás de cada artesanía hay una historia, un proceso y hasta parte de la cosmogonía de diversas comunidades indígenas.

CANASTAS DE PALMA

La primera de ellas son las canastas de hoja de palma trenzada y artículos de cestería, esta artesanía es una de las más antiguas. Se obtiene deshebrando las hojas de palma, antes la función de estas cestas era la de almacenar granos o quesos, hoy día muchos las usan de elemento decorativo o para guardar cualquier articulo pequeño.

Al cortarla se tiene que tener mucho cuidado de no lastimarse, ya que las hebras de esta hoja, son muy filosas. Para poder tejerla es necesario mantener estas hojas frescas y flexibles, por ello las guardan en lugares oscuros y con mucha humedad, para poder manejar el tejido. Los grandes observadores notarán que existen diversos tipos de trenzados, unos más complejos que otros, los hay de colores y de diversas formas, según la creatividad de quien las elabora.

REBOZOS DE SANTA MARIA DEL RÍO

Otro de estos artículos artesanales de la entidad, son por supuesto los rebozos de Santa María del Río, símbolo de la mexicanidad. El rebozo de este icónico municipio es uno de los más buscados y distintivos de todo el país.

Los hay muy finos, de seda natural y otros de artisela o algodón pigmentado. Aún ahora se manda hacer al gusto en el típico telar. Los colores de estos rebozos se obtienen de colorantes naturales, los hay con dibujos antiguos, grecas que tienen significado, existe uno llamado el “Caramelo”, porque lleva siete distintos hilos de colores otro que se llama “al pinto abierto”, unos se usan a la espalda, otros como bufanda. De los dibujos hay gran cantidad de estilos de bordado el más distintivo, el de pajarillos encontrados.

MUÑECAS HUASTECAS

También hay artesanas que se dedican a la elaboración de muñecas huastecas, parecidas a las muñecas “Marías”, pero éstas portan el típico quechquemitl, y una trenza alrededor de la cabeza repleta de listones de colores.

Estas simpáticas muñequitas están elaboradas con tela, parecida a una jerga delgada, la cual puede variar en tonalidades. Es común verlas blancas, morenas y hasta negras. El quexquemetl tiene el típico bordado al de uno de tamaño normal. Algunas llevan el petob o tocado distintivo de la vestimenta de las mujeres de la Huasteca Potosina. Sus articulaciones en ocasiones pueden moverse, gracias a una rudimentaria estructura a base de hilos, que permiten mover a la muñeca.

CAJAS DE MADERA TARACEADA

La madera como elemento de creación también ha servido para dar origen a hermosas piezas decorativas, como lo son las típicas cajas de madera taraceada. Estas cajitas se elaboran también en el municipio de Santa María del Río, muchas de ellas las ocupan como estuches para guardar sus rebozos.

También llamadas “reboceras”, llevan un típico diseño artesanal que consiste en estar elaboradas en maderas, con algunos diseños en la superficie, cada diseño tiene un significado, y son elaboradas también para distintos eventos como las bodas.

El taraceado consiste en incrustar varios pedazos o delgadas capas de madera, para ir perfilando el diseño sobre la superficie, en el cual debe ser notorio el relieve de cada capa de madera para darle volumen al diseño.

CERÁMICA EN BARRO

La cerámica en barro, aunque es típica en diversas regiones del país, la producción de este elemento artesanal también se realiza en la entidad. Una de ellas son las piezas de barro Blanco, que elaboran en la localidad de Tamasopo, en la Huasteca Potosina.

Estas piezas según mencionan algunas artesanas, tienen que ser elaboradas en ciertas fechas donde hay luna llena, por tradición oral saben que sólo así sus piezas en cerámica serán más resistentes y duraderas. Esta típica cerámica color crema, se origina de la mezcla del barro con yeso, y puede tener diversas utilidades.

Una de ellas, es la creación de garrafas de barro, para mantener el agua fresca, también jarras con sus respectivos vasos, cajas y cuencos. Pueden ir decorados con diversos trazos, según la visión de cada artesana.