Aprueban reformas para la profesionalización de servidores públicos

La finalidad es tener una garantía gubernamental para responder a los cambios de decisiones políticas y administrativas. 

El Sol de San Luis

  · domingo 27 de octubre de 2019

Congreso del Estado de San Luis Potosí

La aprobación que hizo el Congreso del Estado a reformas a la Ley Orgánica del Municipio Libre del Estado de San Luis Potosí, para que el síndico, tesorero y oficial mayor de los ayuntamientos cuenten con título o cédula profesional, es un paso importante para la profesionalización de los servidores públicos, sostuvo la diputada Paola Alejandra Arreola Nieto.

La diputada promovió la reforma a los artículos, 13 en su párrafo sexto, 70 en su fracción V, 80 en sus fracciones, I, y II, y 83 en su fracción I; y adición al artículo 80 la fracción III, de la Ley Orgánica del Municipio Libre del Estado de San Luis Potosí, la cual, ya fue aprobada por el pleno del Congreso del Estado.

Anteriormente el regidor Rafael Cárdenas Govea había sido denunciado en el Congreso | Foto: Norma Rivera

Con las reformas se establece como requisito que las personas que funjan como: síndico; tesorero; y oficial mayor; de que cuenten con título y cédula profesional de abogado en el caso de síndico y de contabilidad pública, administración pública o economía en el caso de tesorero; y, tres años de antigüedad en el ejercicio de la profesión. Esto, con la finalidad de ser una garantía gubernamental para responder a los cambios de decisiones políticas y administrativas.

Con esta modificación, se busca profesionalizar la función pública municipal, ya que los servidores públicos municipales, particularmente quien desempeña la función de: síndico; tesorero; y oficial mayor, son quienes están más cercanos a la ciudadanía, pues es a éstos a quienes les hacen saber de los requerimientos de servicios, y sus necesidades.

Por ello, es elemental que las personas que desempeñen estas funciones, sean aptas, perceptibles, conciliadores de intereses, con sensibilidad para dar atención, y prestar un buen servicio a la sociedad; además de ser observantes de los planes y programas de trabajo de forma institucional.