El partido Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA) apoyó la propuesta del presidente Andrés Manuel López Obrador para que, a través de una consulta popular, se juzgue a los ex presidentes de México, “ya que solo con este tipo de acciones tan representativas es que se podrá ir frenando la corrupción y la impunidad en todos los niveles”.
Así lo dijo Sergio Serrano Soriano al añadir que “se tiene hasta el 15 de septiembre para juntar millón y medio de firmas de ciudadanos, es una situación completamente inédita y muestra de la voluntad distinta de hacer las cosas”.
Añadió que como en todo el país, en San Luis Potosí también la mayoría de la gente está de acuerdo en que se enjuicie a los ex presidentes, pero esto hay que plasmarlo en una consulta para que el presidente y la propia Fiscalía General de la República sepan que hay el respaldo del pueblo mexicano, porque evidencias en contra de los ex mandatarios hay de sobra.
Serrano Soriano recordó que la Constitución menciona que un presidente de la república solo puede ser enjuiciado por traición a la patria, lo cual puede tener varias interpretaciones, pero el hecho es que todas las tropelías cometidas por lo menos por los últimos cinco ex presidentes son traición a la patria “la corrupción es sin duda traición a la patria”.
Por su parte, Octavio García Rivas secretario de formación del CEE de MORENA, detalló que “por ejemplo Carlos Salinas de Gortari encabezó el fraude electoral más monstruoso en 1988 y privatizó los bienes de la nación, Ernesto Zedillo fue el artífice del rescate financiero llamado Fobaproa que los mexicanos seguimos pagando”.
“Vicente Fox aunque ganó la elección democráticamente, no se atrevió a cortar con la corrupción del pasado y más temprano que tarde traicionó al pueblo que le dio su confianza, incluso aceptó haber hecho todo lo posible desde la presidencia para que Andrés Manuel López Obrador no llegara al ejecutivo federal”.
“Felipe Calderón llegó a la presidencia también a través de un fraude electoral y después en su ánimo de legitimarse desató la llamada guerra contra el narcotráfico que derivó en el baño de sangre que seguimos sufriendo y finalmente Enrique Peña Nieto fue un corrupto encumbrado, sacando beneficios para sí mismo y su camarilla, incluso impulsó las famosas reformas estructurales a base de sobornos”.