La Dirección de Protección Civil del Ayuntamiento capitalino colabora en un estudio para actualizar la información referente a la situación geológica en el llamado Paseo de la Presa San José, que desde hace dos meses ha impedido la instalación de vendedores de alimentos, por riesgos de deslaves.
Con ello, se ha plantado la posibilidad de reubicar la zona de comida en este paraje, aunque también se aclaró que cualquier proyecto será analizado en conjunto con los vendedores, tomando en cuenta sus sugerencias.
El estudio aparentemente fue solicitado por la Dirección de Comercio Municipal, en su urgencia por dar una respuesta a los aproximadamente 30 comerciantes de alimentos que ocupaban el área hoy vedada.
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Fueron investigadores de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí los que alertaron del riesgo de deslaves y se estableció un "polígono de riesgos y posibles derrumbes", que afectó precisamente en el cerro junto a la tradicional zona de alimentos.
El polígono se estableció del lado noroeste, 543 metros y un área de nueve mil 143 metros cuadrados, mientras que del noreste un perímetro de 752 metros y un área de 13 mil 987 metros cuadrados, que incluyen además de la zona de los puestos de comida, el estacionamiento y el pasillo hacia el mirador.
Aunque también quedó prohibido el acceso a paseantes, algunos de ellos ya pueden acceder a unas cuantas áreas del Paseo de la Presa San José; sin embargo, la zona de comedores sigue fuera de servicio.