AMLO se despidió de San Luis Potosí: "me voy contento", dice

Con una auténtica verbena a las afueras del Centro de Convenciones de San Luis Potosí, este sábado al mediodía se llevó a cabo la despedida del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, de nuestra entidad; al ser anunciada su visita como la última de su mandato a tierras potosinas.

Con un mayor número de puestos ambulantes que en anteriores ocasiones, donde se vendió la ya tradicional figura del "amlito", tazas, banderines, gorras y en esta ocasión también camisetas con la leyenda impresa de "Hasta Siempre Presidente", la explanada del recinto sede se vio repleta para dar el adiós a quien dejará el cargo más importante de la República el próximo primero de octubre.

Oficialmente el evento se llamó Balance Económico, Desarrollo Industrial y T-MEC, donde se dieron a conocer todo tipo de cifras alegres por parte del Gobierno de México, saliente y entrante.

Los actores estelares fueron el primer mandatario, acompañado -como ha sido en las últimas semanas- de la virtual presidenta electa, Claudia Sheinbaum Pardo.

Previo a su llegada se dieron todo tipo de manifestaciones en favor de las figuras más madrugadoras; la primera en llegar fue la presidenta de Morena en el estado, Rita Ozalia Rodríguez Velázquez, lo que dio inicio a la "guerra de porras" entre militantes del Partido Verde Ecologista de México, perfectamente identificados por el color fluorescente de su atuendo, y los del Movimiento de Regeneración Nacional, ellos ataviados de color guinda; quienes fueron estratégicamente divididos por un pasillo central, por aquello de las pasadas broncas; los morenos con vivas a su partido, a Rita Ozalia, Gabino, Claudia y por supuesto al presidente, aunque se vieron opacados por las loas de "gobernador, gobernador " y los gritos de "pollo, pollo" y "verde, verde", pero sobre todo porque a estos sí se les ocurrió cargar con enormes pancartas y matracas, que sonoras retumbaban en el enorme salón.

Apenas la gente comenzaba a dar signos de desesperación cuando a las 10 de la mañana con 45 minutos fue anunciada la llegada de los invitados estelares, quienes llegaron acompañados del gobernador potosino, Ricardo Gallardo Cardona.

En el presidium destacó la presencia de miembros del gabinete de la próxima presidenta, entre ellos Marcelo Ebrard Casaubon y Juan Ramón de la Fuente, así como del actual: Rogelio Ramírez de la O y Raquel Buenrostro Sánchez.

El primero en tomar la palabra fue el mandatario estatal, quien dio la bienvenida a los invitados, aunque calientes los ánimos por la batalla de porras previa, fue recibido con abucheos por el lado guinda del salón.

La danza de los números -todos positivos y alentadores- corrió a cargo de Raquel Buenrostro y Marcelo Ebrard, titulares de Economía, actual y próximo, respectivamente, así como de Ramírez de la O, actual secretario de Hacienda, quien repetirá en el gobierno de Sheinbaum.

Luego de ello tocó el turno a la presidenta electa, quien no dejó pasar la oportunidad de destacar el excelente resultado de las giras que realiza de la mano del presidente de México, hasta ahora a lo largo 16 estados, en una transición qué llamó "inédita"; así como de nombrar a AMLO como el mejor presidente que haya tenido México, "quien, como Benito Juárez, le devolvió la dignidad a la República".

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Aseguró que la transformación continuará en su gobierno con la premisa de que "por el bien de todos, primero los pobres", mística que aplicará en su gobierno que también continuará con el llamado "humanismo mexicano".

Finalmente confirmó que la forma de trabajar de su gobierno será "trabajar para el pueblo y con el pueblo".

Para concluir, con un extenso discurso de casi media hora, López Obrador inició recordando a potosinos ilustres como Ponciano Arriaga, quien acuñó la frase -dijo- "mientras más me golpean más digno me siento", lo que arrancó el aplauso de parte de los asistentes, como endosándole la cita al orador.

Hizo también historia de Camilo Arriaga y Juan Sarabia, a quienes también alabó por luchar en tiempos del porfiriato, "en un tiempo en el que cuando alguien luchaba por la justicia era tachado de bandido".

Destacó el gabinete conformado por la virtual presidenta de México, parte del cual, dijo, en su gobierno ya dio muestras de capacidad.

Por eso me da gusto estar aquí, porque va a continuar el bienestar como un derecho del pueblo, expresó, "y acompañando a la próxima gobernadora", remató el presidente, bajando de cargo a Sheinbaum Pardo.

Finalmente, López Obrador se despidió de San Luis Potosí, diciendo: "me voy contento, y estoy mucho más feliz desde hace dos meses; traigo motor nuevo, ando al cien, bateando arriba de 300, me retiro y voy a jubilarme, queda México en muy buenas manos", concluyó.

Aunque por momentos y gracias a los discursos se convirtió en nostálgica despedida, al ser oficial, el evento concluyó con la interpretación del Himno Nacional Mexicano.