Ambulantes regulares señalaron que pese a que esperan un aumento en ventas en este próximo inicio de semana santa, temen que esto no pueda ser así debido a las regulaciones de la Dirección de Comercio Municipal.
"Esperamos un incremento de hasta el 70 por ciento, pero hay que decir algo, hasta ahora no nos han dicho si vamos estar ubicados en los lugares de siempre, debido a la llegada del turismo a la capital".
Refirieron además que esto se debe a que año con año, son reubicados estratégicamente y además son reducidos el número de puestos, según el rubro al que se dediquen, ya sea comida como antojitos, artículos como cubrebocas y hasta en la venta de juguetes.
"Muchos compañeros son retirados pues sus permisos no son vigentes, o lo que vende pues no tiene nada que ver con la venta que regularmente se hace en la calle. De ley es comida y otro tipo de artículos como recuerdos o los que le llaman souvenirs ".
En este sentido, las y los comerciantes indicaron también que las ventas altas se empiezan a reflejar días antes de la llegada del martes Santo, que es cuando el arribo de turistas se hace más evidente.
"Y vienen buscando de todo, de comida pues elotitos, esquites, y de artículos cubrebocas, el año pasado fue así y lo que más se vendió, también buscan cofrades pero esos los venden mayormente en llaveritos con los globeros, comúnmente aquí vienen buscando comida o aguas frescas".
El año pasado, comentaron varios comerciantes, muchos de ellos fueron retirados del pasaje Hidalgo, para ponerlos en puntos estratégicos, para que así dejarán zonas libres para que el turismo pudiera transitar adecuadamente y ser testigos de la arquitectura que ofrece el centro histórico.
"Pues esperamos que este año nos vaya bien y no haya conflictos por la ubicación y que tampoco den permisos por temporada a otros comerciantes que pueden llegar de otros estados. Que venga el turismo y consuma lo que trabajamos aquí ", señalaron.