La Unidad de Gestión del Centro Histórico advirtió que la colocación de publicidad en postes y otra infraestructura pública está prohibida y genera contaminación ambiental, por lo que inspectores se dan a la tarea de retirarla.
Tales tareas forman parte del Programa de Ordenamiento del Centro Histórico y es permanente; la publicidad también se retira de cabinas telefónicas, edificios públicos y otras áreas que son socorridas.
El equipo de Inspección de la Unidad de Gestión retira en este operativo permanente de limpieza de imagen urbana, diariamente alrededor de 6.5 kilogramos de papel que resulta de anuncios prohibidos.
En la mayoría de las veces, se trata de publicidad no autorizada por el Ayuntamiento de negocios particulares, principalmente de servicios y otros; se destacó que hay medios para publicitar eventos u otros espectáculos, que contaminan menos; de acuerdo con la dependencia, la intención es disminuir la contaminación visual que genera este tipo de anuncios en el centro de la ciudad.
Asimismo, los inspectores también se mantienen al pendiente de la distribución de publicidad en pasquines, folletos o volantes, que está prohibida si no se cuenta con el permiso respectivo para su repartición.
Se exhortó a los anunciantes a atender las prohibiciones del Reglamento de Anuncios, incluyendo a los negocios establecidos que utilizan anuncios tipo bandera, de tijera o similares con los que obstruyen el paso peatonal o vehicular.
En este sentido, se destacó que también se trabaja en evitar que establecimientos excedan sus medidas para ejercer su actividad y ocupen la banqueta o el arroyo vehicular para exhibir mercancías.