Una vez concluido el acueducto de la presa “La Maroma”, este comenzará a funcionar, ya que está conectado a uno de los manantiales, aguas arriba.
Así lo dio a conocer el titular de la Comisión Estatal del Agua, Jesús Medina Salazar, quien destacó que esto permitirá llevar agua a 22 comunidades de Villa de Guadalupe y Matehuala.
El funcionario estatal dejó entrever que para Marzo estaría concluida la cortina de ese vaso de captación, “la construcción de la presa La Maroma continuará y a más tardar para el mes de marzo de 2019 estará concluida, pues se ha llegado a acuerdos con quiénes no estaban a favor”.
El acueducto de dicha presa comenzará a funcionar a principios de año y llevará agua a 22 comunidades de los municipios de Villa de Guadalupe y Matehuala, insistió.
Debemos apostarle a fuentes de abastecimiento superficiales, dijo, “en el altiplano potosino la solución son las presas, hay que descartar el uso de pozos ya que la calidad del agua de la zona no podría utilizarse”.
Recordó que el agua que llega a la localidad de Cerrito Blanco, en el municipio de Matehuala, está contaminada por grandes cantidades de flúor y arsénico, por lo que para garantizar el abastecimiento de agua en el altiplano, lo más viable es la construcción de más presas.
Podemos encontrar más pozos que nos den una mayor cantidad de agua, dijo, pero la calidad no es la idónea.
El titular de la Comisión Estatal del Agua advirtió que solo se necesita una presa, “la orografía da para construir cuatro o cinco presas, si queremos tener Matehuala por 100 años más, los pozos no son la solución“.
Finalmente, Medina Salazar desestimó la posibilidad de una desalinizadora en el Altiplano, pues aunque hay acuíferos llenos de agua salada, las desalinizadoras son para procesos de grandes volúmenes, no aplica para pozos donde se extraen cinco litros por segundo, serían procesos muy caros”.