Entusiasmo y anhelo se perciben en los pasillos del Tecnológico de Monterrey campus San Luis Potosí. En sus salones, predomina la sapiencia de aquellos académicos qué con su vasta experiencia y trayectoria educativa, forman a jóvenes ávidos de conocer el mundo.
Alumnos que ríen, juegan, conversan y estudian en cada uno de los rincones de este icónico campus. Espacios los cuales están diseñados específicamente para que desarrollen sus habilidades y pensamiento cognitivo en cada una de las áreas académicas de esta institución. Y la Campana de la Victoria es el espacio testigo y muestra de ello.
Cada logro y meta alcanzada por el alumnado es reconocido en esta área que desde un punto focal dentro de la explanada principal del campus, se celebran con fuertes sonidos generados por el movimiento del badajo de este instrumento haciendo honor al desempeño y ambición académico de cada estudiante. Logros concretados gracias al fortalecimiento continúo(tanto colectivo como individual) en el desarrollo de estos jóvenes que, reconocen también el esfuerzo y seguimiento de sus profesores para formar sus mentes deseosas de descubrir y adquirir nuevos conocimientos.
El ambiente estudiantil del Tecnológico de Monterrey Campus San Luis Potosí es el fiel ejemplo de como este espacio formador de futuras generaciones, realiza un trabajo completamente integral para que su estudiantado resuelva y cambie el acontecer diario de este país. Sus aulas son un espacio de entendimiento y sabiduría, pero también de confianza y desenvolvimiento social.
Las y los adolescentes del área de preparatoria conversan sobre su futuro y sus ganas de sobresalir, desenvolverse y distinguirse como alumnos pertenecientes al Tecnológico de Monterrey.
Cada paso que dan, sin duda, refleja el camino de la excelencia, de la perseverancia y sobre todo, el sendero de la autodeterminación. Sus universitarios siguen los pasos de los profesores investigadores que forman parte de este plantel, los cuales los inspiran y motivan para desarrollarse en sus estudios de profesionalización.
En cada clase, se percibe el espíritu emprendedor y visionario de su fundador Eugenio Garza Sada, empresario y también Benemérito de la Educación.
Pareciera que cada estudiante posee una mirada que refleja el empeño que se necesita para ser estudiantes de excelencia, un reto para cualquiera en medio de una sociedad repleta de información y conocimiento.
En esta institución académica, también se percibe el respeto al individuo, la pluralidad de pensamiento y las formas tan diversas en las que hoy el estudiantado puede llegar a destacarse. Ya sea por medio del arte, el deporte y el conocimiento.
Estas singularidades del Tecnológico de Monterrey campus San Luis Potosí, le otorgan un capital, simbólico e intelectual que lo convierte en una potencia académica de renombre.
Ser un individuo con una formación educativa amplia y completa, permite a las y los alumnos a desarrollarse, romper paradigmas y por supuesto ser un ser humano de cambio. Las áreas deportivas de este campus, también parece recordarnos que el tejido social y cultural en el que se desarrollan los alumnos, se complementan con las prácticas físicas que incentivan la disciplina y el empeño que se necesita para figurar y trascender tanto en el ambiente académico, como en el laboral y personal que exigen los tiempos actuales.
El estudiantado, personal académico y administrativo del Tecnológico de Monterrey campus San Luis Potosí representan la evolución de una educación repleta de atributos que se encuentran a la altura de las exigencias de la sociedad moderna.
Hoy día son un referente de enseñanza y aprendizaje, listos para contribuir en la sociedad actual del conocimiento. Ciertamente el Tecnológico de Monterrey campus San Luis Potosí cuenta con lo necesario para enfrentar los retos que los contextos sociales hoy día demandan.