Marco Hernández, sobrino del famoso cantautor Chico Che, presentó en la casa de Cultura de Tabasco en la Ciudad de México el proyecto musical que asegura, le costó mucho trabajo concretar, pues no solo fue difícil lograr convencer a artistas de renombre para que participaran, sino que por poco, no logra reunir los fondos necesarios para hacer el sueño realidad.
Ayer por la mañana, familiares, amigos y admiradores del tabasqueño se reunieron para hacer pública la próxima salida del disco Chicocheísmo, que cuenta con la participación de Celso Piña, Roco Pachukote, Dr. Shenka, Kenny y los Eléctricos, Pato Machete, Banda El Mexicano, Salón Victoria, entre otros, quienes con su estilo, grabaron las canciones más populares del artista.
En el lugar los asistentes además disfrutaron de una exposición de los artículos personales de Chicho Che que incluyen su tradicional overol y su teclado que lo acompañó en sus innumerables giras en las décadas de los setenta y ochenta por toda la República Mexicana antes de su muerte causada por un derrame cerebral a los 43 años de vida.
Del Derecho a la música
En charla con su sobrino, entre las curiosidades que resaltaron sobre Chico Che es que él nació en la Ciudad de México por el rumbo de Azcapotzalco, pero sus padres que sí eran tabasqueños se lo llevaron a aquella ciudad cuando tenía cinco años de edad, logró estudios universitarios en la carrera de Derecho y a la par estudió música, por lo que se inclinó por lo segundo y su padre licenciado y su mamá, profesora no lo aceptaron, por lo que su atuendo fue el contrario a lo que ellos representaban y por ello el overol que era el uniforme de los obreros de principios del siglo pasado.
Marco Hernández también externó que su mamá Haydeé, quien es hermana del desaparecido artista, le aseguró que a principios de su carrera musical Chico Che quería incursionar en el rock and roll, pues era admirador ferviente de Los Rebeldes del Rock y tras varios fracasos formando agrupaciones que tocaran el género, se inclinó por lo tropical que era música más local y reunió a los músicos que lo acompañaron hasta su muerte y a quienes nombró La Crisis.
Su música siempre fue alegre y picaresca, todas las letras contienen doble sentido, pero nunca fueron ofensivas, sino todo lo contrario, se aceptaron como divertidas y es recordado por temas como “Los Nenes con los nenes”, “De quen chon”, “Chido Chido”, “Las Pelotas”, “Uy, qué miedo” y la más popular de todas ellas, “Dónde te agarró el temblor”.
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