El temor a una nueva ola de contagios de Covid en Europa y en el resto del mundo provocó el derrumbe de las bolsas, las divisas y los precios internacionales del petróleo.
Ante los rebrotes en el viejo continente los líderes de las economías anuncian medidas de reconfinamiento para frenar una nueva oleada de contagios, lo que espanta a los inversionistas.
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La canciller alemana, Angela Merkel, dialogó con los líderes estatales a través de una videoconferencia y acordó un confinamiento parcial que provocará el cierre de bares, restaurantes, cines, instalaciones deportivas y ferias comerciales del 2 al 30 de noviembre.
"Noviembre será un mes de la verdad. El incremento del número de infecciones nos está obligando a tomar duras contramedidas para romper la segunda ola", dijo el ministro de Finanzas, Olaf Scholz, en su cuenta de Twitter después de la reunión virtual del gabinete del gobierno encabezado por Angela Merkel.
Mientras tanto, la economista jefa del Banco Mundial, Carmen Reinhart, pidió “audacia” a los líderes del Grupo de los 20 en las medidas para aliviar la deuda de los países con mayores índices de endeudamiento, pues se corre el riesgo de que la economía mundial tenga una década perdida en desarrollo.
"Este no es el momento de ser tímido en la resolución de la crisis de la deuda. Las propuestas deben ser audaces en términos de reducir la deuda de los deudores, porque si no... los riesgos de una década perdida son muy grandes".
Los ministros de Finanzas del Grupo de los 20 tienen previsto realizar un encuentro extraordinario a inicios de noviembre para finalizar los detalles de una iniciativa que busca abordar las dificultades de deuda de algunas naciones en desarrollo, de acuerdo con un compromiso alcanzado previamente este mes, señaló la directiva del Banco Mundial.
EFECTO REBROTE
Aunque las bajas en los mercados internacionales fueron generalizadas, la Bolsa de Argentina fue una de las que más sufrió en la sesión de ayer, al registrar una caída de 6.8 por ciento y acumular en las primeras tres jornadas de la semana una baja ligeramente superior a 17 por ciento.
La economía sudamericana acaba de concluir con el Fondo Monetario Internacional una reestructura de deuda por más de 65 mil millones de dólares, aunque el riesgo país alcanzó su máximo histórico al alcanzar mil 491 puntos.
Mientras tanto, en Wall Street, el índice de volatilidad bursátil VIX, conocido como el "indicador del miedo" de Wall Street, aumentó hasta su mayor nivel desde el pasado 4 de septiembre, al alcanzar 37.28 unidades.
El “indicador del miedo” reflejó su impacto en los principales indicadores de Nueva York, que terminaron con caídas por encima de tres por ciento, siendo el tecnológico Nasdaq el que tuvo la mayor contracción, al caer 3.93 por ciento.
Mientras tanto, el industrial Dow Jones se contrajo 3.43 por ciento; el Standard & Poor’s (S&P) 500, que aglutina a las 500 empresas más grandes de ese país terminó con un retroceso de 3.53 por ciento.
En el viejo continente, el DAX 30, índice de la Bolsa de Frankfurt, perdió 4.17 por ciento y la Bolsa de París registró una contracción de 3.37 por ciento.
Julián Fernández, analista de Bursamétrica, explicó que el desplome bursátil fue resultado del nerviosismo por una segunda ola de Covid-19, principalmente en Europa y Estados Unidos, el cual continuará hasta que no exista una cura o se tengan avances más contundentes en el desarrollo de la vacuna.
Fernández precisó que con un nuevo cierre social las industrias europeas también se verían obligadas a detener sus tareas y, por consiguiente, se generará un segundo impacto en la economía de todo el mundo.
Por su parte, especialistas de Banorte consideraron que en el corto plazo los inversionistas estarán atentos a la evolución de la pandemia, la publicación de datos económicos, una temporada de reportes corporativos y a la fase final del proceso electoral estadounidense.
Pero el daño no se quedó en las bolsas, los precios del petróleo cayeron más de cinco por ciento el miércoles, enviando al Brent europeo a un mínimo de cuatro meses, ya que el aumento de las infecciones de coronavirus en Estados Unidos y Europa provocaba nuevos confinamientos y alentaba las expectativas de nuevos descensos en la demanda de combustible.
El precio del West Texas Intermediate en Estados Unidos (WTI) se contrajo 3.92 por ciento, a 38.02 dólares el barril, su nivel más bajo desde el 2 de octubre.
Como consecuencia de las caídas en los mercados el dólar se convirtió en el refugio de los inversionistas. Así, el peso perdió 27 centavos frente al dólar.
Con información de Miguel Ángel Ensástigue | El Sol de México
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