Alumnos de sexto semestre de la carrera de Ingeniera Industrial y de Sistemas del Instituto Tecnológico de Monterrey, campus San Luis Potosí, tuvieron la oportunidad de vivir un bloque con sentido humano, con duración de cinco semanas, en la que trabajaron con la empresa Tighitco de la industria aeroespacial.
Los estudiantes propusieron a la empresa cómo mejorar los procesos que se estaban llevando a cabo en estas líneas de producción para mejorar la productividad y a su vez, el buen funcionamiento de las mismas “desde que nos dijeron el giro de la empresa, la verdad me emocioné mucho”, expresa Ana Sofía Mendoza, estudiante de sexto semestre.
Un bloque con sentido humano es una unidad de formación en la que las actividades a realizar son identificadas con el atributo de servicio social y sentido humano.
Estos bloques son diseñados para fortalecer las competencias que desarrollen el compromiso ético y ciudadano de las y los alumnos.
La empresa Tighitco cuenta con dos líneas de producción, siendo estás “Solar” y “Spirit”, en las cuales se fabrican piezas para la industria aeronáutica. Se caracterizan por ser muy grandes y pesadas, por lo cual es difícil manipularlas y no pueden ser trabajadas en una línea de producción tradicional, ya que el trabajo que se realiza es artesanal para asegurar los estándares de calidad necesarios.
“Los chicos tenían un reto muy grande, el cual era primero entender a la perfección el funcionamiento de las líneas, y en segunda, hacer propuestas de mejora realistas”, menciona Georgina Martínez, directora de entrada de la Escuela de Ingeniería y del Programa de IIS en campus San Luis.
Esther Altamirano, gerente general de la planta Tighitco, y socio formadora del reto, les planteó dos objetivos principales para los estudiantes “el reto para mi tenía dos caras: darle la oportunidad a los chicos que venían de una situación de pandemia de sumergirse en la empresa y exponerlos a los retos que se enfrenta un profesional cuando empieza su vida laboral”.
Una de las propuestas que brindaron los alumnos, fue la reorganización de cada una de las celdas de la línea “Solar”, respetando las restricciones de equipamiento y lugar, y priorizando la seguridad de cada uno de los colaboradores de la planta. En cuanto a la línea “Spirit”, se necesitaba cuidar la parte del flujo de material y asegurarse de que cada colaborador tuviera las herramientas necesarias en el lugar correcto y de la manera correcta.