Recientemente en una estancia infantil de San Luis Potosí, once niños resultaron contagiados del Virus de Coxsackie, situación que activó vigilancia epidemiológica en los menores.

De acuerdo al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) este mal se presenta en el cuerpo humano en forma de salpullido, este suele aparecer en las manos y pies; el portador también puede sufrir de llagas muy dolorosas en la boca ( al exterior, encías, lengua, paladar); a este virus también se le conoce como Enfermedad de Boca Mano Pie.

Principales síntomas del coxsackie

Si cree que usted o alguno de sus cercanos puede padecer este virus, los síntomas pueden ir desde la fiebre, la inapetencia, la rinorrea y dolor de garganta; dichas molestias pueden aparecer entre 3 y 5 días después de la exposición. En otros casos puede aparece una erupción(similar a ampollas), generalmente en las manos, los pies y la boca entre uno y dos días después de los síntomas iniciales.

¿Cómo va viajando de cuerpo en cuerpo?

De acuerdo a la información proporcionada del IMSS, el coxsackie se transmite por contacto directo con secreciones de la nariz y garganta, ampollas y heces de personas infectadas.

¿Quienes pueden contagiarse?

Es muy común que los niños y niñas de 10 años o menos contraigan esta enfermedad, pero también hay casos donde adolescentes y hasta adultos pueden contraer dicho virus. El pico máximo de contagio se presenta a los dos años de edad.

¿Hay cura o tratamiento contra el coxsackie?

Hasta la fecha no existe un tratamiento médico específico. Lo que recomienda el Instituto Mexicano del Seguro Social, es controlar la fiebre y mantener una buena hidratación vía oral. Para las lesiones se pueden usar sustancias como el polvo coloide.

¿Qué hacer en caso de detectar síntomas?

Al notar los síntomas antes mencionados, es de suma importancia llevar de inmediato al menor a revisión y no automedicarlo, de igual forma, notificar de la situación en los lugares donde asiste el niño para que se tomen medidas preventivas.

y se transmite en lugares donde la convivencia es muy cercana, como en las guarderías.

El virus se puede propagar incluso cuando no hay sintomatología, por medio de las heces fecales, con el cambio de pañales y por las secreciones respiratorias.

El contagio se presenta en los primeros tres días de contacto y después aparecen los síntomas. Los brotes del padecimiento tienden a ocurrir durante el verano y a principios del otoño.

Algunas recomendaciones

• Medidas básicas como el lavado de manos.
• Utilizar cubiertos individuales.
• Evitar saludar de beso.
• Estornudar con el codo del antebrazo.
• Alimentar al menor con líquidos fríos y lácteos.
• Evitar la ingesta de jugos que le provoquen dolor.