¿Sabía usted que en los Juegos Olímpicos de Berlín 1936, México participó en la disciplina de basquetbol donde finalizó con la medalla de bronce? siendo una de las tres preseas conseguidas en esa edición para nuestro país, ¿y también que el equipo mexicano era integrado los basquetbolistas potosinos de nombres José Pamplona Lecuona e Ignacio de la Vega?
Corría el verano de 1936; por segunda ocasión en su historia Berlín abría sus puertas para recibir la XI edición de la era moderna de los Juegos Olímpicos, que se desarrollaron del 1 al 16 de agosto con un total de 19 disciplinas para efectuar 129 competiciones, en las que participaron 4066 atletas.
La celebración de estos segundos juegos olímpicos que albergaba Alemania, también llamados Jugos Hitlerianos, se realizaba en el comienzo de un marco turbio político global, que un año más destara el inicio de la tan lamentable II Guerra Mundial.
Esto significó que la representación deportiva de varios países se ausentará para este año, sobre todo del continente europeo; 49 delegaciones acudieron a estos juegos veraniegos; en ese año México fue representado por 32 deportistas en 8 deportes; logrando el bronce Fidel Ortiz en Boxeo, el equipo de Polo Varonil, y por supuesto el tercer lugar en basquetbol.
Entre este grupo de participantes se encontraba el representativo de baloncesto, integrado por Rodolfo Choperena Iryzarri, Paul Fernández Robet, Silvio Hernández del Valle, Francisco Martínez Cordero, Jesús Moreno; los hermanos Hugo y Carlos Borja Morca, Greer Skaussen y los potosinos Pamplona y De la Vega, todos ellos comandados por el coach Alfonso Rojo de la Vega.
Pese a que los potosinos no eran parte del cuadro titular, pues los estelares eran jugadores de Chihuahua y la Ciudad de México; si fueron piezas importantes a la hora de entrar al juego desde la banca, para llevar a México a conseguir una importante medalla por equipos.
Fueron 22 equipos los que se registraron para esa edición, el representativo mexicano debutó el 7 de agosto, el escenario era un viejo club de tenis que fue improvisado para que sus dos mesas de arcilla fueran trazadas con los rectángulos basquetboleros.
México iniciando con el píe derecho su participación venciendo 32 a 8 a su similar de Bélgica; pero el seleccionado de Filipinas volvió a la realidad a los mexicanos que cayeron en un duro juego que finalizó 30-32, pese a la rivalidad y división que existía entre chihuahuenses y capitalinos.
Paro la armonía regresó para el siguiente juego, pues nuevamente los aztecas se hicieron con un importante triunfo ante Italia a los cuales derrotaron 34 a 17 para conseguir su boleto a las semifinales de torneo olímpico.
En un jugo histórico, la quinteta mexicana enfrentó al poderoso equipo de Estados Unidos, que al final se llevó la victoria con marcador de 25 a 10, en un choque que registró datos interesantes; por primera ocasión en el torneo un equipo impido que los estadounidenses marcaran más de 30 unidades en un jugo; pero también México no anotó dentro y fuera del perímetro, pues sus 10 unidades fueron productos de tiro libre.
Al día siguiente se desarrollaron las finales, el día era lluvioso el Berlín, pero eso no impidió que se desarrollaran los juegos; el primero de ellos fue por la medalla de bronce donde México enfrentó a Polonia, al cual venció sin problemas 26 a 12, colocándose en la élite del basquetbol mundial; mientras que Estados Unidos se colgó el oro tras vencer 19 a 8 a Canadá.
En esa ocasión, a la ceremonia solo acudió el capitán de cada equipo; por México estuvo presente Jesús Olmos, quien recibió de manos de Adolfo Hitler la medalla de bronce de cada uno de los integrantes del equipo, que posteriormente las recibieron como les correspondía.