Originaria de Matehuala, San Luis Potosí, Jimena Valderrama se encuentra entrenando con la escuadra de Gallos Blancos de Querétaro de la Liga MX Femenil, donde espera en algún momento poder debutar como jugadora profesional, después de muchos años para alcanzar este objetivo.
Pese a su corta edad, la joven guardameta cuenta con amplia experiencia dentro del futbol llanero de la capital potosina, donde ha dejado muestras de su talento, además de ser una líder en los equipos que ha defendido, situación que la llevó a probarse a tierras queretanas donde ya es contemplada para integrarse al primer equipo femenil.
Desde los 6 años, Valderrama comenzó a jugar futbol, jugando entre las calles camélenses, rodeada por niños que salían a la calle a patear el balón; el hecho de jugar con puros hombres le fue forjando carácter y fuerza, sin tener miedo y jugando a la par de los amigos de sus hermanos.
Después de militar en viarios equipos de amigos llegó a Tigres en la capital, ahí jugaba como delantera, situación que en los torneos la relegaba a la banca, situación que la hizo decidir tomar el reto de ser portera, donde se fue ganando un lugar como titular.
Jimena paso por el equipo de Lumer, donde enfrentó a Chivas y Necaxa, pudiendo combinar el soccer con el rápido y el futbol uruguayo, donde jugando para el equipo de Kasbah conquistó el primer Torneo femenil de Cristo Rey.
Valderrama, actualmente es tatuadora, estudió la carrera de Comercio y Negocios Internacionales, actualmente vive en Querétaro concentrada con el primer equipo donde entrena desde hace un mes; cuenta con beca universitaria para continuar con sus estudios y se espera que por su capacidad en la portería sea proyectada y se integre al equipo de la Liga MX Femenil.