Hechos insólitos en partidos Atlético de San Luis contra Cruz Azul

Corría el minutos 56 cuando el asistente arbitral número dos Eduardo Costa sufrió un desgarre en el muslo de la pierna derecha en un sprint que dio por la banda

Roberto Mirabal | El Sol de San Luis

  · domingo 22 de agosto de 2021

Cortesía | Liga MX

Tal parece que los partidos entre Atlético de San Luis y Cruz Azul que se disputan en el estadio Alfonso Lastras están marcados por inusuales situaciones que se presentan durante el desarrollo de los mismos.

En el cotejo realizado este fin de semana correspondiente a la jornada 6 del torneo Grita México AP21 de la Liga MX, corría el minutos 56 cuando el asistente arbitral número dos Eduardo Costa sufrió un desgarre en el muslo de la pierna derecha en un sprint que dio por la banda, por lo que las acciones tuvieron que se detenidas para que fuera atendido.

Cortesía | Liga MX

Costa Orea no pudo recuperarse y después de siete minutos tuvo que tomar su lugar el cuarto asistente arbitral, Alejandro Funk, en un hecho que pocas veces se da en un partido.

Por tal motivo, Eduardo pasó a realizar las funciones de Alejandro, ya con hielo adherido a su pierna derecha, y Funk Villafañe debutó en el torneo como segundo árbitro asistente, luego de que se ha desempeñado solo como central o cuarto árbitro en la Liga MX, de Expansión, Tercera División, Copa MX y categorías menores.

Cabe mencionar que en este 2021 ya se había presentado una situación similar el 8 de mayo, en el partido entre Atlas contra Tigres en el estadio Jalisco del torneo anterior, cuando apenas al minuto 7 el árbitro asistente uno Pablo Hernández resbaló y se desgarró por lo que ya no pudo continuar y su lugar fue tomado por el cuarto nazareno Oscar Mejía.

Otra situación que se recuerda en el estadio Alfonso Lastras en un San Luis contra Cruz fue aquel del 17 de enero de 2020 cuando al minuto 28 un perro invadió el terreno de juego y se paseó unos segundos en el centro del campo, hasta que Germán Berterame del equipo potosino lo tomó y cargó para llevarlo hasta la banda, mientras el can le lamía la mejilla amistosamente al argentino, lo que trajo que en redes sociales la acción se hiciera viral. Días después el Club Rojiblanco anunció que el canino pasaba a ser integrante del equipo con el nombre de "Tunita".