Atlético de San Luis pagará los 120 millones de pesos por el "descenso virtual" al finalizar como último lugar de la tabla de cocientes, luego de ser exhibidos y goleados por los Tuzos de Pachuca con marcador de 1-5, ante 5 mil 448 aficionados en el estadio Alfonso Lastras Ramírez.
Los dirigidos por Leonel Rocco ni por qué tenían una última posibilidad de ganar en casa, ante su afición y esperar lo que hiciera Atlas, salieron a jugar con esa motivación que se requería, al contrario desde el arranque del partido con la alineación improvisada que saltó al terreno de juego, se observaron nerviosos, titubeantes y faltos de hambre de triunfo.
Así Pachuca manejó mejor los tiempos del partido, hasta se dio oportunidad para exhibir a los jugadores del San Luis, como al novato Luis Gerardo Ramírez, lateral izquierdo que tuvo que salir de cambio, lo mismo que toda la defensa encabezada por Ramiro González y Rodrigo Noya.
El primer tiempo finalizó 1-2 para los visitantes, con goles de Roberto De La Rosa el 0-1 apenas al minuto con 32 de iniciado el encuentro, y luego él anotó el 0-2 al minuto 20. El descuento de los locales llegó al 26' por conducto de Ramiro González.
En la parte complementaria, el 1-3 de Erick Sánchez al 58', y de nuevo él anota su segundo tanto que era el 1-4 al 61' de tiempo corrido, para enseguida caer el de Renato Ibarra al minuto 64 que fue el definitivo 1-5. Todavía anotaría él mismo un sexto tanto pero el VAR lo anuló por una mano previa.
Cabe mencionar que el torneo pasado San Luis finalizó en último lugar de la clasificación general bajo el mando de Memo Vázquez, con 11 puntos y 12 derrotas. Leonel Rocco los deja con 12 unidades y 11 derrotas, en la posición 16, pero aún con la posibilidad de finalizar en el último peldaño de la tabla.
EL EQUIPO NO SE VA: ATLÉTICO DE MADRID
Previo al partido Atlético de Madrid anunció que el Club Atlético de San Luis no está en venta y que a pesar del pésimo torneo, esté y el pasado, se queda en la ciudad de San Luis como filial de los Colchoneros. Con lo que descarta que se venda, y esos empresarios estadounidenses que andaban interesados, podrían sumarse como patrocinadores, no como dueños.