“Contemplemos a Nuestro Padre Jesús Nazareno que nos ama con amor sublime, Él nos dará la fuerza transformadora y edificante para ser operarios de Su Reino. No lo decepcionemos”: Canónigo Gilberto Amaya Martínez
Jóvenes recibieron el Sacramento de la Confirmación, por lo que en la homilía el Vicario General de la Arquidiócesis Potosina, los exhortó a invocar al Espíritu Santo, pues esta experiencia dinámica los debe impulsar a confirmar su fe y su amor a Jesucristo
Con un espíritu jubiloso se celebró la magna festividad de Nuestro Padre Jesús Nazareno en la Parroquia de la Compañía, ubicada en la Plaza de Los Fundadores de la zona centro de la capital potosina, donde el Párroco, Pbro. LCC Jorge Aurelio Ramírez Torres y el Vicario, Pbro. Carlos Aguilar Jiménez, prepararon un programa cultural, artístico y religioso para festejar al santo patrono.
La Misa solemne para honrar a Nuestro Padre Jesús Nazareno, titular de la Compañía de Jesús, fundada por los Jesuitas, fue presidida por el Canónigo, Pbro. Dr. Gilberto Amaya Martínez, Vicario General de la Arquidiócesis Potosina, quien acudió en representación del señor Arzobispo, Mons. Jorge Alberto Cavazos Arizpe.
Jóvenes recibieron el Sacramento de la Confirmación, por lo que en la homilía el Padre Gilberto Amaya, los exhortó a invocar al Espíritu Santo, pues esta experiencia dinámica los debe impulsar a confirmar su fe y su amor a Jesucristo, teniendo un firme compromiso de participar en las diversas actividades de la Iglesia, por ejemplo, formando parte de los grupos juveniles y participando en alguno de los apostolados, siendo servidores de su comunidad.
“Que nuestra mirada y nuestro corazón invoquen al Espíritu Santo, que nos concede sus 7 sagrados dones: sabiduría, entendimiento, ciencia, consejo, piedad, santo temor de Dios y fortaleza”.
Indicó: “Contemplemos a Nuestro Padre Jesús Nazareno que nos ama con amor sublime, Él nos dará la fuerza transformadora y edificante para ser operarios de Su Reino. No lo decepcionemos, amémosle como Él nos ama, hay que corresponder a Su amor Sagrado, su amor ágape, y con palabras, obras y actitudes, alabémoslo”.