Museo Federico Silva, único en su tipo

• El edificio Patrimonio del Estado, pasó en el año 2003, de Escuela Modelo a Museo Contemporáneo
• A lo largo de 17 años, más de 100 artistas han exhibido de manera temporal sus obras más significativas
• Un Comité Curatorial es quien analiza y decide a los talentosos artistas que expondrán sus obras

“En ese momento el gobernador Fernando Silva Nieto le preguntó al Maestro Federico Silva: -¿qué piensa que hacer con todo esto que tiene aquí, con todas estas esculturas y pinturas?-; a lo que Federico Silva respondió: -cuando yo me muera quiero dejar esto para el pueblo de México, para que sea un museo y esta obra la disfrute el pueblo-. Entonces el gobernador le dijo: -¿y no ha pensado en dejarle algo al pueblo de México pero en San Luis Potosí?, si quiere hacemos un museo en el estado-”.

Museo Federico Silva, Escultura Contemporánea, centro cultural y artístico de excelencia, lugar que alberga la exposición permanente del Maestro Federico Silva, cuya colección integrada por ochenta magníficas esculturas creadas por él, es el legado para el pueblo y para el gobierno de San Luis Potosí desde el año 2003.

De acuerdo con su director general, Enrique Villa Ramírez, éste es el único recinto dedicado a la escultura contemporánea en Latinoamérica y el más significativo que tiene nuestro país, pues “Federico Silva es hoy por hoy el artista más importante de México, y las esculturas que donó a San Luis Potosí son una obra de primerísima calidad”.

Antes del museo

Desde su nacimiento en la época del Virreinato, el edificio de este museo ha sido un lugar con vocación social, pues siempre ha sido un edificio público. Comenzó siendo un hospital para españoles e indios en el año de 1611, cuando Juan de Zavala donó lo que en ese entonces era su Hacienda a la orden religiosa de los Juaninos; el lugar fue atendido por los mismos monjes hasta 1825, cuando pasó a manos del Estado.

Posteriormente, en 1895 se convirtió en oficinas aduanales, que funcionaron hasta 1905; en ese mismo año el edificio fue demolido casi en su totalidad y quedó solamente en pie el antiguo templo religioso. A partir de entonces y hasta 1907 se construyó el actual inmueble, para dar paso a lo que se conoció como Escuela Modelo, que era parte del proyecto educativo del Porfiriato, y se mantuvo así hasta el año 2000, cuando se llevaron a cabo los trabajos de adaptación para convertirse en el Museo Federico Silva, Escultura Contemporánea.

Una simple coincidencia

Enrique Villa Ramírez, quien desde hace más de 40 años ha sido amigo cercano de Federico Silva, relató en exclusiva para El Sol de San Luis, que gracias a un encuentro fortuito que tuvieron en un aeropuerto el Maestro Silva y él, aquel entonces, gobernador de San Luis Potosí Fernando Silva Nieto, fue que comenzó a formarse la idea de traer a la entidad potosina un museo de gran importancia y trascendencia nacional e internacional.

Detalló que, para la buena suerte de ambos, les tocó viajar en el mismo vuelo y hasta compartir lugar en el avión, esto los llevó a entablar una amigable conversación, pues les pareció “curioso” que ambos tuvieran el apellido Silva.

“Fue ahí que el gobernador Fernando Silva le preguntó: -¿usted a qué se dedica?-, y el Maestro Silva le respondió: -yo soy escultor, tengo mi taller en Tlaxcala, el día que esté de visita por allá lo invito a conocerlo-. Después el Maestro Silva preguntó: -y usted, ¿a qué se dedica?-, y Silva Nieto dijo -yo soy el gobernador de San Luis Potosí-", narró el director del recinto.

A partir de ahí, ambos estrecharon lazos de amistad y posteriormente el gobernador de San Luis Potosí visitó la fábrica del Maestro Silva, la cual, en palabras de Villa Ramírez, “es como un viejo casco de Hacienda”, que está rodeado de ahuehuetes y por la zona atraviesa un río, que es famoso ya que por ahí pasó Hernán Cortés, “un lugar con mucha historia”.

Describió que, al llegar al taller y ver la obra del Maestro Silva, el gobernador se quedó impactado con sus esculturas, y consideró que era una buena oportunidad para que San Luis Potosí tuviera un espacio “museístico”, con una obra impresionante y de un artista importante.

“En ese momento el gobernador Fernando Silva Nieto le preguntó al Maestro Federico Silva: -¿qué piensa que hacer con todo esto que tiene aquí, con todas estas esculturas y pinturas?-; a lo que Federico Silva respondió: -cuando yo me muera quiero dejar esto para el pueblo de México, para que sea un museo y esta obra la disfrute el pueblo-. Entonces el gobernador le dijo: -¿y no ha pensado en dejarle algo al pueblo de México pero en San Luis Potosí?, si quiere hacemos un museo en el estado-”, puntualizó el directivo.

En un principio, Federico Silva pensó que lo estaba “vacilando”, dijo Villa Ramírez, por lo que la conversación sólo quedó ahí, pero al cabo de unos meses el gobernador Silva Nieto llamó personalmente al Maestro Silva y lo invitó a San Luis Potosí porque ya tenía varias opciones de edificios, para que él pudiera establecer su museo.

Federico Silva no lo podía creer, hasta le preguntó si acaso era una broma, pero el gobernador le respondió que no era ninguna broma, y que el museo ya era una realidad. Sin pensarlo más Federico Silva vino a San Luis Potosí, vio cada una de las opciones de edificios que el gobernador le presentó, pero el que más le gustó fue este edificio, que en aquel entonces albergaba todavía la Escuela Modelo, pues le llamó la atención que se encuentra en el centro de la ciudad

Fue en el año 2000 cuando el edificio se sometió a trabajos de adaptación para convertirse en lo que hoy es el Museo Federico Silva, Escultura Contemporánea. Para el 18 de septiembre de 2003 quedó oficialmente inaugurado, y a la fecha sigue exhibiendo las obras de los escultores más importantes de San Luis Potosí, de México y del mundo. Hace poco más de dos meses el recinto cumplió 17 años de vida.

“Fue en una ceremonia muy solemne, donde los mismos estudiantes le entregaron al Maestro Silva las llaves de su escuela, para que se convirtiera en el museo; obviamente, a los alumnos se les construyó otra escuela más adecuada a la actualidad. Yo creo que se hizo un trabajo de adaptación muy importante, porque se respetó la partida arquitectónica del edificio, además está declarado Patrimonio del Estado”, expresó Villa Ramírez.

Dato curioso: Antes de traer las esculturas de la obra de Federico Silva a San Luis Potosí, se tuvo que hacer una réplica exacta de ellas en unicel, para medir los espacios que éstas ocuparían al interior del museo, y así facilitar su acomodo. Posteriormente fueron traídas una por una desde Tlaxcala, que es donde se encontraba el taller del Maestro Silva.

Escultores que han destacado en el museo

A lo largo de 17 años, más de 100 artistas han exhibido de manera temporal sus obras más significativas; escultores y pintores, tanto nacionales como internacionales. Se destacan algunos artistas hombres de renombre, como: Manuel Felguérez, Juan Soriano, Ghunter Gerzo, Vicente Rojo, Tiburcio Ortiz, Germán Cueto, Jorge Yazpik, Arno Avilés, Pedro Cervantes, Jorge Du Bon, Fernando González Cortázar, Jesús Mayagoitia, Kiyoto Ota, Mathias Goeritz y Hersúa, entre otros.

De igual forma el museo ha tenido gran interés por exponer las creaciones de artistas mujeres, quienes han tenido una presencia muy importante en el movimiento escultórico mexicano. Destacan nombres como el de: Ángela Gurría, Ivonne Domenge, Naomi Siegman, Edna Pallares, Paloma Torres, Irma Palacios, Ana Castelán, Josefina Temín, Leonora Carrington, Ana Cristina Mejía Botero, Águeda Lozano, entre otras.

Actualmente en el recinto se encuentra expuesta, de manera temporal, la colección del escultor Xavier Esqueda titulada “Dos puntos de vista”; del escultor Germán Venegas la obra denominada “Evocaciones”; y del escultor español Carlos Ciriza, su obra “Fragmentos de tiempo y materia”.

Dato curioso: Actualmente Federico Silva, de 97 años, sigue trabajando y haciendo arte. Aunque ya no esculpe de manera directa en piedra, con cincel y martillo; él sigue pintando y haciendo maquetas de sus esculturas en cartoncillo.

Continuando con la entrevista, Enrique Villa Ramírez destacó que, para que un artista pueda llegar a exponer sus obras en el Museo Federico Silva, Escultura Contemporánea, lo principal que éste necesita es tener un gran talento. Explicó que existe un Comité Curatorial que se encarga de seleccionar a los artistas y obras que se presentarán; está garantizado que el criterio que se toma para elegir a los escultores, es de la más alta calidad, ya que dicho Comité está conformado por artistas y críticos de arte, que analizan las obras y a sus creadores.

Yo presento los proyectos al Comité Curatorial y ellos autorizan quién se presenta. Nos llegan muchas propuestas, los mismos artistas mandan su currículum y su dosier para ver la obra que tienen. Es un gran prestigio para quienes han llegado a presentarse en este museo

El arte y las nuevas generaciones

Aunque se pudiera creer que las nuevas generaciones no se interesan por el arte, Villa Ramírez aseguró que, antes de la contingencia sanitaria por el Covid-19, quienes normalmente visitaban el museo eran grupos de jóvenes, sobre todo las inauguraciones de exposiciones, donde el 70 por ciento de los asistentes era un público menor de 45 años.

No obstante, afirmó, el recinto ha buscado acercarse de diferentes maneras a todos los sectores de la población, sobre todo en estos tiempos de pandemia, y se ha apoyado de las redes sociales para difundir la historia del museo, sus más recientes exposiciones, realizar recorridos virtuales y algunos talleres, entre otras actividades paralelas.

Tenemos también una serie de programas, por ejemplo uno que se llama El museo va a tu escuela, en el que se llevan a las instituciones educativas imágenes del recinto, se hacen talleres con los estudiantes y posteriormente realizan visitas presenciales al museo. Normalmente entre semana, todas las mañanas solíamos estar llenos de niños, y por la tarde suelen visitarnos jóvenes, sobre todo universitarios

De igual forma, dijo, el museo no sólo ha sido un gran atractivo para los potosinos, también para los turistas nacionales y extranjeros, pues por lo general lo suelen visitar turistas provenientes de Estados Unidos, China, algunos países de Europa e incluso de Centroamérica.

El museo y la nueva normalidad

Aunque el recinto cerró por más de tres meses, a causa del confinamiento social, a partir del 07 de julio reabrió sus puertas al público. El edificio porfiriano está recibiendo visitas de lunes a domingo, excepto lo martes, en un horario de 11:00 a 15:00 horas. Los visitantes y el personal laboral deberán acatar las medidas sanitarias, desde pasar por los tapetes desinfectantes, usar gel antibacterial, portar correctamente el cubrebocas durante su visita, lavarse las manos, no tocar las esculturas y mantener sana distancia.

En cada una de las salas podrá haber un máximo de 6 personas, y en la biblioteca “Lily Kassner” sólo podrán estar dos visitantes simultáneamente. De momento no se permite la entrada a menores de 12 años y a adultos mayores de 59 años. Asimismo, las inauguraciones, talleres educativos, visitas guiadas, cine club y matiné están temporalmente suspendidas, a fin de resguardar la salud de los asistentes, así como del personal que labora en el museo.

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