Fomentar el consumo de artesanías es la intención de la colaboración entre el área de “Corredores Potosinos” de la Dirección de Desarrollo Económico del Municipio y el Sistema Estatal DIF, que pondrán en marcha 3 exposiciones artesanales en diferentes sedes, durante el mes de marzo.
La responsable de “Corredores Potosinos”, Mariana Escalera informó que los eventos reunirán a artesanos y productores potosinos, adheridos al programa del Ayuntamiento capitalino “Puro Potosino” y al Sistema de Desarrollo Empresarial Potosino (SIDEP).
El domingo 15 de marzo, el Museo del Virreinato será la primera sede que reúna a los expositores con la venta de productos 100% artesanales, de las 10 a las 18:00 horas.
Del 19 al 22 de marzo con motivo del “Día del Artesano”, las instalaciones de la tienda del DIF Estatal, será el lugar en el que luzca la gran variedad de artesanías entre muebles y adornos, en la calle Álvaro Obregón No. 520 de las 8 a 20:00 horas.
Por último, mencionó que el jueves 20 de marzo, la magna exposición se realizará en el Instituto Potosino de Investigación Científica y Tecnológica (IPICYT), de las 8:00 a 20:00 horas, en conmemoración del 20 Aniversario del Instituto.
Entre las piezas artesanales, Mariana Escalera precisó que habrá artículos elaborados con palma, madera tallada, en cantera y cajas taraceadas, así como los tradicionales rebozos, por mencionar algunos.
Ambos programas “Puro Potosino” y “SIDEP”, expuso que tienen como fin, formalizar las actividades de los artesanos y productores, “apoyarlos en su crecimiento comercial, orientarlos para darse de alta ante la Secretaría de Hacienda e incluso que puedan exportar sus productos”.
Además, desde el Gobierno Municipal, mencionó Mariana Escalera que se les brinda acompañamiento para que su producto se introduzca a cadenas comerciales, como es el caso de la tienda HEB, que ya tiene a la venta productos potosinos como Tostadas Maralmi y Aceite Oleico, “las primeras incluso ya se comercializan en otros países”.
Antes de finalizar, expresó que “por fortuna cada vez son menos los comparadores que regatean los precios a los artesanos, las personas ya valoran más el trabajo hecho a mano y muchas veces lo prefieren a los artículos prefabricados”.