Capacitan a personal del Museo de la Máscara para mejorar atención a personas adultas mayores

El Museo Nacional de la Máscara, capacitó a jóvenes de servicio social del museo, a fin de que puedan ofrecer una mejor asistencia a personas con discapacidad y personas adultas mayores, aunado a las clases que se les prepara para fungir como guías de este recinto cultural.

Esta capacitación se llevó a cabo en la Sala Candil del Museo Nacional de la Máscara, misma que también puede ser conocida por el público visitante, al igual que las Salas Permanentes y Temporales que resguardan la más completa colección de máscaras representativas de la cultura de diversas regiones del estado, del país y de otras partes del mundo.

El envejecimiento de la población se acelera en todo el mundo y San Luis Potosí no es ajeno a esta realidad. Actualmente, hay millones de personas de la tercera edad en el país; sin embargo, no todas reciben los cuidados necesarios en esta etapa de sus vidas. Frente a esto, es esencial saber qué hacer para mantener la salud y el bienestar de un adulto mayor.

Antes que nada, es importante entender quién es un adulto mayor. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), se considera adulto mayor a cualquier persona mayor de 60 años. A medida que envejece, el ser humano experimenta fisiológicamente un declive progresivo en las funciones orgánicas y psicológicas. Por esto, las personas de edad avanzada son más vulnerables a diversas enfermedades y requieren cuidados básicos.

“A la edad de 60 años, la mayor carga de discapacidad y muerte surge de las pérdidas relacionadas con la edad en la audición, la vista y el movimiento, así como afecciones como demencia, depresión, deterioro cognitivo, diabetes, enfermedad cardíaca, accidente cerebrovascular, trastorno respiratorio crónico, afecciones musculoesqueléticas (como osteoartritis y dolor de espalda) y multimorbilidad”, advierte la OMS.

Cortesía | Museo Nacional de la Máscara

Los cuidados para los adultos mayores son muy importantes para su desarrollo cotidiano. No obstante, el deterioro físico derivado del proceso natural del envejecimiento, asociado a la presencia de enfermedades, puede motivar que ellos no puedan realizar por sí mismos las actividades más elementales de la vida diaria.

Por esto, lo primero que debe hacer es identificar y enumerar las necesidades que tiene el adulto mayor en cuanto a nutrición, socialización, higiene y cuidado personal, trastornos mentales, problemas para dormir u orinar, ingesta de medicamentos, chequeos médicos, inmovilidad o cambios en la estructura de la casa para evitar caídas.

Mantener un orden es primordial para el cuidado de un adulto mayor. Establezca una rutina con horarios fijos para realizar actividades diarias como puede ser el baño, las comidas, la ingesta de medicamentos, practicar ejercicios físicos o mentales, tomar una siesta o simplemente ir a dormir a determinada hora.

Recordemos que las personas mayores se sienten más seguras y cómodas moviéndose en un terreno conocido, y eso los motiva a esforzarse más día a día.