El estado potosino se encuentra a solo unos días de iniciar una nueva historia con la llegada de las nuevas administraciones municipales de los 59 ayuntamientos elegidos y debidamente reconocidos como autoridad para llevar a cabo el trabajo de gobierno hacia los próximos tres años.
Diversas cuestiones despiertan el interés en este tema partiendo de un mapa político que geográficamente estará dominado por el Partido Verde, ya que concentrará la gran mayoría de los ayuntamientos, lo que puede ser benéfico para las y los ciudadanos al estar respaldados por un gobierno estatal que encabeza Ricardo Gallardo Cardona, quien a su vez, puede recibir todo el apoyo del nuevo gobierno federal que en unas semanas más estará iniciando en la figura de la primera mujer Presidenta de México, la doctora Claudia Shienbaum Pardo.
Se trata de un momento de gran trascendencia para la vida de San Luis Potosí, es especial porque desde la llegada de Ricardo Gallardo ha experimentado una transformación sin precedentes que no se había dado en por lo menos 30 años de gobiernos que hicieron poco o nada por la gente y por los municipios, pero ahora, con un dominio casi aplanador, es posible que la gran mayoría de los ayuntamientos estén en condiciones de ejecutar una gran cantidad de obras y de ampliar los programas sociales que han sido la característica de este gobierno para a abatir el rezago y la marginación.
El Partido Verde no solo demostró un amplio dominio tras los resultados de la elección que se llevó a cabo el pasado 2 de junio, sino que en los meses posteriores, varios de los presidentes municipales electos de otras fuerzas políticas, optaron por sumarse a la causa de este instituto político tras reconocer que el proyecto de desarrollo y la propuesta de Ricardo Gallardo es la que cuenta con el respaldo de la gente y la que tiene mayor viabilidad para alcanzar un crecimiento sostenido.
El Gobernador del Estado, ha demostrado que el suyo, ha sido un gobierno que tiene visión de futuro, pero además, está soportado en obras y acciones que están a la vista de todos, por lo que los hechos son en principal sustento de su administración ya que está decidido a llevar a San Luis Potosí a los primeros planos del territorio nacional al grado de ser reconocido como el mejor mandatario del país.
Ante este escenario, los alcaldes electos y aquellos que se reeligieron, tiene frente a ellos un reto muy importante: realizar un gobierno que dé resultados y que vaya en concordancia con el proyecto de transformación que busca Ricardo Gallardo, e incluso el gobierno federal, a efecto de que se renueve la confianza ciudadana hacia los gobiernos del Partido Verde, pues tres años, resultan poco tiempo para poder alcanzar estos objetivos.
Junto a este panorama , está por supuesto la oposición que aunque ha sido observante y crítica férrea del gobierno de Ricardo Gallardo, han sido igualmente beneficiados con los recursos y los programas que se destinan para la población aún siendo de un gobierno distinto y en donde no se aplican criterios de distinción y menos se ha relegado a ningún ayuntamiento en los tres años en los que el mandatario ha estado al frente, por lo que éste panorama seguramente no será distinto a lo que se ha venido observando y claro está, no tiene porqué serlo.
Ahí está el ejemplo de Enrique Galindo, quien por cierto está rodeado de fuertes rumores de abandonar a su partido el PRI , pero sin dejar la causa de la oposición para que todos aquellos seguidores de la llamada herencia maldita puedan mantenerse en ese último reducto que es el gobierno municipal de la capital.
Para Galindo, seguramente su dinámica no cambiará mucho, tal vez porque mantendrá ese interés persistente en ser candidato al Gobierno del Estado para el 2027, por lo que su gestión estará basada en autopromoverse políticamente con los recursos del ayuntamiento para poder escalar un poco en su objetivo, aunque es claro que tendrá una misión cada vez más complicada para lograrlo, ya que acaba de perder un territorio muy importante como es Villa de Pozos y porque además, no ha trascendido más allá de la capital potosina como para considerar que puede ser contendiente en tres años más.
Los viajes, la inseguridad en las calles, vialidades que están en el total abandono, la falta de agua y un sinfín de problemas en los que ha sido incapaz de resolverlos, se mantendrán para los habitantes de la capital potosina gracias al desinterés de su alcalde.
Al edil capitalino que de milagro se aferró al gobierno municipal, se le acaba el tiempo para intentar resolver en tres años lo que no pudo o no quiso en su primer periodo como alcalde, por lo que seguramente estará rodeado de fuertes críticas dada su proclividad a viajar y a meter la cabeza bajo el suelo cuando los problemas urgentes se presentan como fue la crisis por la falta de agua, la cual, se prestó solamente para hacer negocio y jamás resolvió la demanda de servicio.
Serán tres años de gran oportunidad para San Luis Potosí y muy seguramente la gran mayoría de las y los potosinos serán susceptibles en alcanzar los beneficios de los gobiernos municipales apoyados por el gobierno del Estado, pero será muy importante que haya un trabajo conjunto y una idea clara de sumarse al esfuerzo del Gobernador del Estado.
X @lozano_ray