/ lunes 13 de julio de 2020

Espacio de Reflexión

Las verdades siempre aparecen, nunca quedan en el dominio de unos cuantos, tarde que temprano se nos da el regalo para quienes saben buscar. Creo que nos están usando como experimento social, en razón de intereses que no corresponderían a los del colectivo mundial.

Ha sido todo un éxito diplomático el primer viajé internacional del Presidente de Mexico, Andrez Manuel López Obrador. Habría que ver lo que son los acuerdos políticos en favor de esa misma clase: la política que somete a la sociedad mundial, pues como en varias ocasiones lo hemos comentado, menos del uno por ciento de la población mundial, controla y manipula, en muchos casos al resto de los habitantes de Mundo.

Un presidente norteamericano, que inició su campaña electoral hace cuatro años, insultando a los mexicanos y lo siguió haciendo durante mucho tiempo, amén de las presiones que ejerció sobre nuestro País para el control de nuestra frontera Sur, pero también para donar muchos millones de dólares a países expulsores de ciudadanos en búsqueda de llegar al EEUU a través de nuestro territorio Mexicano, es alguien que hace valer la hegemonía del poder sobre los demás.

Desde luego que es de celebrar el acuerdo de libre comercio y que, como una herramienta más, debe servirnos para cuando menos paliar el desastre económico que estamos viviendo pero que, por si solo jamás podrá revertirse el daño en el patrimonio de las personas tan rápido como es deseable.

La economía empezó una desaceleración palpable a finales de 2018, ya para entonces tomaban desiciones el Presidente electo, AMLO, con un panorama muy incierto, suspendió en forma por demás incomprensible, pero que se veía como la venganza que se niega, el NAIM, y con ello la desconfianza en la inversión privada externa y Nacional, apareció.

Un viaje que fue cuidado hasta el último detalle y hablado entre ambas naciones, igualmente con los invitados especiales. ¿Qué hay de tras de todo ello? Los acuerdos que seguramente beneficiarán a los personajes están por verse en adelante. Una cosa es segura, lo sabremos en su momento y mucho tiene que ver con popularidad y elecciones.

Con pena vemos cómo los acuerdos que benefician a las naciones, tienen que pasar por el tamiz de los egos y conveniencias políticas, momentos especiales que sean útiles a quienes toman las desiciones por todos nosotros, por los pueblos que habitan las naciones, y disfrazadas de patriotismo, enviando mensajes para que la gente piense que se lucha por el beneficio de la soberanía e independencia, lo que realmente no existe más.

La globalización, la cooperación y coexistencia, la competencia, el intercambio de bienes y servicios y mucho más, han hecho que tale términos como soberanía e independencia queden en desuso, para que sólo existan líneas físicas divisorias en la tierra que, es patrimonio de los que habitamos el espacio.

Cierto, hubo que tener una organización política y social pero, nunca ha sido para el servicio de las personas, aún cuando pagamos por ello y si para el control humano, junto al dinero público y el poder que representamos la humanidad entera.

Sería muy sano que se camine más rápido en beneficio de los pueblos, con beneficios tangibles que puedan dar alivio a tanto penar de millones de personas. Sería muy sano también, se gobierne de cara a las personas y no en el aislamiento del poder, lo que no existe en ninguna campaña política, por el contrario van y te buscan a tu casa o, trabajo y te prometen de todo pero, jamás cumplen promesas de campaña electoreras.

Las verdades siempre aparecen, nunca quedan en el dominio de unos cuantos, tarde que temprano se nos da el regalo para quienes saben buscar. Creo que nos están usando como experimento social, en razón de intereses que no corresponderían a los del colectivo mundial.

Ha sido todo un éxito diplomático el primer viajé internacional del Presidente de Mexico, Andrez Manuel López Obrador. Habría que ver lo que son los acuerdos políticos en favor de esa misma clase: la política que somete a la sociedad mundial, pues como en varias ocasiones lo hemos comentado, menos del uno por ciento de la población mundial, controla y manipula, en muchos casos al resto de los habitantes de Mundo.

Un presidente norteamericano, que inició su campaña electoral hace cuatro años, insultando a los mexicanos y lo siguió haciendo durante mucho tiempo, amén de las presiones que ejerció sobre nuestro País para el control de nuestra frontera Sur, pero también para donar muchos millones de dólares a países expulsores de ciudadanos en búsqueda de llegar al EEUU a través de nuestro territorio Mexicano, es alguien que hace valer la hegemonía del poder sobre los demás.

Desde luego que es de celebrar el acuerdo de libre comercio y que, como una herramienta más, debe servirnos para cuando menos paliar el desastre económico que estamos viviendo pero que, por si solo jamás podrá revertirse el daño en el patrimonio de las personas tan rápido como es deseable.

La economía empezó una desaceleración palpable a finales de 2018, ya para entonces tomaban desiciones el Presidente electo, AMLO, con un panorama muy incierto, suspendió en forma por demás incomprensible, pero que se veía como la venganza que se niega, el NAIM, y con ello la desconfianza en la inversión privada externa y Nacional, apareció.

Un viaje que fue cuidado hasta el último detalle y hablado entre ambas naciones, igualmente con los invitados especiales. ¿Qué hay de tras de todo ello? Los acuerdos que seguramente beneficiarán a los personajes están por verse en adelante. Una cosa es segura, lo sabremos en su momento y mucho tiene que ver con popularidad y elecciones.

Con pena vemos cómo los acuerdos que benefician a las naciones, tienen que pasar por el tamiz de los egos y conveniencias políticas, momentos especiales que sean útiles a quienes toman las desiciones por todos nosotros, por los pueblos que habitan las naciones, y disfrazadas de patriotismo, enviando mensajes para que la gente piense que se lucha por el beneficio de la soberanía e independencia, lo que realmente no existe más.

La globalización, la cooperación y coexistencia, la competencia, el intercambio de bienes y servicios y mucho más, han hecho que tale términos como soberanía e independencia queden en desuso, para que sólo existan líneas físicas divisorias en la tierra que, es patrimonio de los que habitamos el espacio.

Cierto, hubo que tener una organización política y social pero, nunca ha sido para el servicio de las personas, aún cuando pagamos por ello y si para el control humano, junto al dinero público y el poder que representamos la humanidad entera.

Sería muy sano que se camine más rápido en beneficio de los pueblos, con beneficios tangibles que puedan dar alivio a tanto penar de millones de personas. Sería muy sano también, se gobierne de cara a las personas y no en el aislamiento del poder, lo que no existe en ninguna campaña política, por el contrario van y te buscan a tu casa o, trabajo y te prometen de todo pero, jamás cumplen promesas de campaña electoreras.

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